El rostro del narcotraficante
colombiano, Pablo Escobar, fallecido hace más de dos décadas, apareció en el Parque
Lleras de Medellín sobre los óleos del pintor colombiano Wilson Rojas, quien, desde
hace 20 años, ha retratado rostros de figuras como Bob Marley, John Lennon,
Marilyn Monroe, Elvis Presley, entre otros, siempre con un colorido singular que
destaca en su estilo pop-art.
A pesar de estar prohibido en
su país, a sus 47 años el artista decidió plasmar la imagen del líder del
Cartel de Medellín, como una forma de experimentar que tuvo un resultado completamente
inesperado, pues la demanda de sus cuadros entre turistas extranjeros
incrementó y se ha convertido en una excelente fuente de ingresos.
“Es el cuadro que más se
vende en el Parque Lleras. Vender un cuadro de Pablo Escobar es tener dinero en
el bolsillo”, dice Rojas a la AFP.
De lunes a sábado, la cara de
uno de los narcotraficantes más temidos fluye del pincel de Rojas para aparecer
en colores chillantes en los lienzos colocados sobre las jardineras del parque
ubicado en el barrio El Poblado, una ciudad que vivió la sangrienta década de
Escobar (1980-1990).
Casi todos sus cuadros miden un
metro de alto por 70 centímetros de ancho y para su elaboración, el pintor se
lleva entre dos y tres días, logrando vender hasta tres pinturas al mes, pero
si son del narcotraficante vende hasta seis piezas mensuales, con un valor
entre 350,000 y 400,000 pesos.
Entre sus mejores compradores
se encuentran los estadounidenses, los cubanos y los puertorriqueños. “El
colombiano no quiere los cuadros, pero el extranjero sí (…). Me parece
curioso que lo compren los gringos”, asegura el pintor.
Por lo anterior, en ese país
está prohibido reproducir su imagen, Rojas dejó de retratarlo durante 20 días,
pero se amparó en el derecho de libre expresión y retomó su labor.
“Algunas veces las
personas me dicen que por qué pinto a ese ‘hijuetantas’. Yo les digo que cada
cual tiene su criterio de si fue malo o bueno. A mí él me es indiferente, nunca
tuve nada que ver con él (…) Si no me lo compraran, yo no lo pinto”, señala
el artista.
Pablo Escobar fue uno de los
traficantes de cocaína más perseguidos por las autoridades estadounidenses,
logró una fortuna de tal magnitud que la revista Forbes lo colocó como uno de los
hombres más ricos del mundo y fue también autor de la década más sangrienta en
Colombia, con el mayor número de homicidios registrados.