El Partido Revolucionario Institucional (PRI) iba relegado, detrás del Partido Acción Nacional (PAN), en los resultados preliminares de las elecciones de 12 gobernadores, consideradas como una prueba para las presidenciales de 2018, .
A altas horas de la noche comenzaron a fluir los primeros resultados de las elecciones de 12 estados, de los cuales nueve gobierna el PRI, en una jornada marcada por cierta violencia y acusaciones de intimidaciones contra los votantes.
De acuerdo con esos primeros resultados, el PRI lideraba en cinco estados: Hidalgo, Sinaloa, Oaxaca, Tlaxcala y Zacatecas. El PAN, a su vez, conserva la ventaja en siete entidades: Aguascalientes, Durango, Puebla, Chihuahua, Quintana Roo, Tamaulipas y Veracruz, con resultados inéditos en estas últimos cuatro estados gobernados siempre por el PRI.
En tanto, el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) se perfilaba como el ganador en la elección de los 60 diputados que conformarán la Asamblea Constituyente de la Ciudad de México dejando en el segundo al gobernante Partido de la Revolución Democrática (PRD).
Momentos después de que las casillas se cerraran, el líder del PRI, Manlio Fabio Beltrones, expresó con confianza la victoria de su partido al asegurar que había ganado nueve estados. “Hoy podemos decir queMéxico eligió PRI”, enfatizó.
Ricardo Anaya, líder del conservador Partido Acción Nacional (PAN), aseguró que su partido nunca había ganado tantos estados en una elección.
El mayor trofeo en juego es Veracruz, estado gobernado por el PRI durante más de 80 años. ,Los tres candidatos de ese estado se declararon triunfadores horas antes de que se conocieran los primeros resultados preliminares.
“Derrotamos no solo a un partido político, derrotamos a todo un sistema corrupto”, dijo el candidato de la alianza PAN-PRD en Veracruz, Miguel Ángel Yunes.
Pero su primo, el candidato del PRI Héctor Yunes Landa, aseguró también que el triunfo era suyo.
Con los conteos preliminares del 63.64 por ciento de los votos, Miguel Ángel Yunes, de la coalición PAN-PRD, tenía 33.17 por ciento, su primo el priista Héctor Yunes 29.07 por ciento y Cuitláhuac García Jiménez, del partido de izquierda Morena, tenía una ligera ventaja con un 28.61 por ciento.
La gestión del impopular gobernador saliente de Veracruz, Javier Duarte, estuvo marcada por casos de desapariciones forzadas por parte de policías estatales, los asesinatos de 18 periodistas y deudas.
Veracruz está considerada como el trofeo más grande entre los 12 estados en juego, porque ocupa el tercer lugar de las regiones con mayor población, 8,1 millones de habitantes.
Varios actos de violencia fueron reportados en Veracruz antes y durante las elecciones.
En otro estado importante, el PRI era el favorito para mantener la gobernación en Tamaulipas (noreste), donde hace unos días estuvo secuestrado durante 24 horas el futbolista Alan Pulido, del club griego Olympiakos, hasta que logró someter a uno de sus secuestradores, arrebatarle el celular y pedir auxilio.
Pero con el 85.70 por ciento de las actas contadas, el candidato del PAN, Francisco García Cabeza de Vaca, tenía a su favor el 50.08 por ciento de los votos, frente al 35.71 por ciento de Baltazar Hinojosa, de la coalición del PRI-Verde-Nueva Alianza.
En ese estado, donde operan los poderosos cárteles de drogas del Golfo y Los Zetas, los candidatos del PAN y el PRI colmaron la campaña electoral de acusaciones por supuestamente haber cedido a las presiones de narcotraficantes.
En 2010, durante la campaña electoral, el candidato del PRI a gobernador, Rodolfo Torre Cantú, fue asesinado y su hermano Egidio lo reemplazó y fue elegido.