La canciller alemana, Angela Merkel, ha sofocado los rumores de que su gobierno aumentará los impuestos con el fin de hacerle frente a las cantidades históricas de personas entrando al país en busca de asilo, negando firmemente los reportes en una entrevista el lunes con el periódico alemán Bild.
Cuando se le pidió que confirmara que no habría aumento en los impuestos, Merkel respondió: “Sí, afirmativo”. Ella continuó: “Podemos estar contentos de que nos hemos administrado bien por años y que nuestra situación económica es buena actualmente”, añadiendo que nadie debería “preocuparse de que un refugiado le merme su propia calidad de atención” en relación el sistema de salud del país.
Los comentarios de Merkel se dieron después de un reporte publicado en el periódico Sueddeutsche Zeitung el sábado, el cual sugería que Berlín y Bruselas habían discutido la posibilidad de implantar un impuesto especial, el cual podría tomar la forma de exacciones más altas al combustible o el IVA, para ayudar a los países a hacerle frente a la crisis de refugiados.
Steffen Seibert, portavoz del gobierno alemán, hizo pública una declaración negando los rumores, en la que dijo: “El caso sigue siendo que no queremos aumentos de impuestos en Alemania, tampoco queremos un impuesto para toda la UE”. El domingo, un portavoz de la Comisión Europea también rechazó la afirmación, diciendo: “No hay tal propuesta actualmente en la mesa o en preparación y la Comisión nunca comenta los rumores en la prensa”, según la agencia de noticias AFP.
A Merkel también le preguntaron en la entrevista con Bild sobre su índice de popularidad, el cual se ha desplomado en semanas recientes. Una encuesta publicada el domingo enBild am Sonntag mostró que 48 por ciento de los encuestados no estaba de acuerdo en cómo manejó Merkel la crisis migratoria, mientras que 39 por ciento apoyó su enfoque.
“Las encuestas no son mi medición”, dijo ella, añadiendo que su labor es hallar soluciones a los problemas. “A eso le estoy dando toda mi atención”, dijo ella.
Merkel ha estado bajo el fuego de algunos de sus aliados políticos. Horst Seehofer, primer ministro de Baviera y presidente del partido Unión Social Cristiana, dijo que consideraría el tomar medidas de emergencia para evitar que los migrantes entren al país por la frontera con Austria si el gobierno federal no tomaba acciones para limitar la migración.
“Limitar la migración es indispensable. Necesitamos un límite para que la integración pueda ser exitosa”, dijo Seehofer en una conferencia de prensa celebrada el viernes, según el Wall Street Journal. Joachim Herrmann, ministro del interior bávaro, fue un paso más allá, diciendo que Baviera tomaría acción legal si el gobierno no hacía más para limitar las cantidades.
“Si el gobierno federal no toma pronto medidas efectivas para limitar el flujo de quienes buscan asilo y con ello amenace la capacidad del estado para actuar, Baviera se reserva la posibilidad de llevar el asunto ante la corte constitucional federal”, dijo Herrmann en una conferencia de prensa.
La semana pasada Bild reportó que Alemania recibiría 1.5 millones de personas que buscan asilo este año, citando un informe confidencial de las autoridades. La Oficina Federal para Migración y Refugiados (BAMF, por sus siglas en alemán) de Alemania dijo que no podía confirmar las cifras.