Con el propósito de
seguir fortaleciendo la formación académica de los alumnos de las Unidades de
Educación Artística Municipal el Centro de las Artes, perteneciente al Consejo
Estatal para la Cultura y las Artes de Hidalgo, plantea la clase magistral de
guitarra clásica con el maestro Carlos Rivero Campero el jueves 03 de
septiembre a las 16:00 hrs. en el Centro Cultural de Real del Monte.
Asimismo en el
Centro Cultural del Valle del Mezquital se llevará a cabo el Concierto de
bienvenida para los alumnos el viernes 04 a las 18:00 horas. Mediante la
guitarra, la música española y mexicana encontrará un punto de encuentro, un
puente construido por las manos de los mexicanos Carlos Rivero Campero, Carlos
Lucio García Flores, y el Español Eduardo Garrido, construido mediante un
selecto programa conformado por el presente y pasado de la música para
guitarra.
Carlos Lucio García
comienza la construcción con un hilo femenino , con agiles notas emprende la
guitarra el Vuelo entre los Retazos de alma y piel (Laura Chávez Blanco) para
erguirse desde la tierra con tres de los sones de Anastasia Guzmán (Son de la
piña ardiente, manantial, guacamaya), Carlos Rivero Tañera al estilo antiguo de
los vihuelistas españoles del renacimiento, ágil, elegante y expresivo la
Fantasía IV de Luys de Narvaez , para posteriormente y con un fino españolismo
interpretará dos estudios de Fernando Sor, concluyendo con la Sonatina
(Federico Moreno Torroba).
Por su parte Eduardo Garrido abre paso al desenlace
del discurso propuesto por los anteriores guitarristas con el Homenaje sin duda
una joya de la guitarra, al ser la única obra compuesta para guitarra sola del
español Manuel de Falla, y dando prueba de su faceta como compositor obsequia
al oyente Los alebrijes de la Ciudad de México, serie de estudios inspirados en
la tierra mexicana que le ha adoptado desde hace algunos años, cerrando el
ciclo de obras, Garrido interpreta cuatro canciones populares catalanas de
Miguel Llobet en donde aires tiernos y festivos se conjugan a manera de
despedida e invitación a permanecer en la contemplación del puente construido
entre música, intérpretes y público.