De acuerdo con la plataforma “En Buen Plan, Abraza Tus Sueños” que lanzó la Secretaría de Salud estatal, el Sistema Estatal DIF (SEDIF) y otros organismos, en los embarazos de adolescentes menores de 15 años, el bebé tiene más posibilidades de nacer con malformaciones físicas y/o neurológicas.
Además puede generar anemias, desnutrición y descalcificación por una mala alimentación en el recién nacido; sufrir de presión alta durante el embarazo (preeclampsia y eclampsia); nacimientos prematuros por complicaciones durante el embarazo debido a un inadecuado desarrollo gestacional.
Además, algunas consecuencias sociales en los padres adolescentes y en el recién nacido son: dificultad para realizar o terminar proyectos personales; dificultad para continuar estudiando; rechazo familiar y social; así como necesidad de trabajar a una corta edad, con un salario bajo (por la falta de estudios) para mantener al recién nacido.
Ante este panorama, el Gobierno del Estado lanzó una estrategia para la prevención del embarazo adolescente que consiste en integrar de manera transversal a las instituciones públicas, privadas y a la sociedad civil, y con ello reducir en 500 embarazos para el año 2016.
En este sentido, Martha Erika Alonso de Moreno Valle, presidenta del SEDIF, subrayó la importancia de orientar a los jóvenes sobre su sexualidad de manera responsable para evitar los riesgos que implica tener un embarazo a temprana edad, además de tratar temas como la depresión y las adicciones.