POR: NATALIA LÓPEZ
Puebla. El que los alcaldes sean asesinados habla de un país que está perdiendo totalmente el control sobre el tema de seguridad, lo cual es muy grave, pues “si un presidente municipal es asesinado, qué podemos esperar los ciudadanos que no tenemos esa protección”, comentó Herminio Sánchez de la Barquera y Arroyo, decano de Ciencias Sociales de la UPAEP, respecto al asesinato del presidente municipal de Naupan.
En entrevista, previa presentación de Michelle Bachelet como ponente del VI Congreso Internacional de Ciencia Política, aseveró que los problemas de seguridad no se podrán resolver de un día para otro, sino a largo plazo; pues tiene que ver con cuestiones sociales, con la situación de las policías y la economía.
“La cuestión de la violencia está muy metida en la sociedad, como se ve en programas de televisión o anuncios. Así como la forma en que se resuelven los problemas en las familias, que muchas veces es a golpes”, indicó el especialista. El combate a la violencia tiene con ello, así como con la responsabilidad social frente a la mujer, a quien se violenta por una cuestión cultural en México.
Por otra parte, destacó que en México hay muy pocos policías, número que no se sabe a ciencia cierta pero ronda los 400 mil; y Puebla es uno de los estados con menor número en el país. “Es cuestión de número pero también de calidad, hay muchos aspectos que están fallando. Otro problema es la tarea de los estados y de la Federación en materia de seguridad no ha sido completa, ningún estado tiene una policía científica, bien preparada”, acotó el especialista en seguridad.
Sánchez de la Barquera y Arroyo precisó que en este año se puede rebasar el máximo histórico establecido en 2017 en cuanto a violencia, esperando que el 2018 pueda ser peor; y tal vez hacia 2020 se pueda ver un cambio.
Sobre el bloqueo en la autopista México-Puebla el pasado fin de semana, por presuntos huachicoleros tras un enfrentamiento con el Ejército, indicó que “en México es una tradición que cuando un grupo hace algo así, no se hace nada”, lo cual debe atenderse, pues todos los gobiernos democráticos del mundo tienen una policía especializada para estos casos; además de que estos actos van en contra de la ley.
Desgraciadamente, apuntó, para que la ley pueda ejercerse lo primero es atrapar a los delincuentes, por lo que de nada sirven las penas altas. “Hay omisiones, colusiones, complicidades, falta de capacidad. Si tenemos pocos policías, tenemos poca capacidad para capturarlos”, aseveró el decano de Ciencias Sociales de la UPAEP.