Javier “el Vasco” Aguirre tendrá que enfrentarse de nuevo ante la justicia española por el presunto amaño de un partido que disputaron Levante y Zaragoza – este último el equipo que dirigía el mexicano- durante la temporada 2010-2011, un caso que estalló en 2015.
Las autoridades investigan si Aguirre participó en el supuesto pago de 1.2 millones de dólares que hizo el Zaragoza al Levante para que se dejara ganar y permitiera la permanencia del conjunto aragonés en primera división. Javier Aguirre ha negado las acusaciones. Sin embargo, la acusación le valió su destitución como director técnico de Japón en febrero de 2015.
El encuentro supuestamente amañado se jugó el 21 de mayo de 2011; en él, el Levante perdió 2-1 ante la escuadra que dirigía el técnico mexicano. El triunfo del Zaragoza le permitió su permanencia en la primera división de la Liga Española. El resultado provocó el descenso del Deportivo la Coruña, uno de los interesados en que se esclarezca el caso.
La Fiscalía explicó en diciembre de 2014 que los jugadores del Real Zaragoza “hicieron llegar en metálico a los jugadores del Levante” el dinero antes del comienzo del partido “como retribución por la pactada victoria del Real Zaragoza”. Aguirre y otros 41 jugadores están bajo sospecha de participar en esa trama.
La jueza Isabel Rodríguez, magistrada del juzgado de instrucción de Valencia archivó en julio de 2017 el caso “al no haber quedado acreditado debidamente el delito objeto de dicha investigación” en la que se había visto envuelto el entrenador mexicano.
El pasado 25 de enero, la magistrada volvió a abrir el caso debido a que no se ha podido aclarar el destino de los 1.2 millones de dólares que extrajeron los futbolistas del Zaragoza antes del encuentro y a que los jugadores del Levante ofrecieron razones insuficientes a la hora de justificar su disminución de gastos.
La acusación de la Fiscalía se centraba en el empresario Agapito Iglesias por haber presuntamente urdido el arreglo del encuentro. Según la misma acusación el pago del amaño había sido repartido en depósitos a diez cuentas bancarias; la de Javier Aguirre y la de nueve jugadores de su plantel los días 17 y 19 de mayo de 2011, quienes dos días después retiraron el dinero en efectivo “para entregarlo a los jugadores del Levante”, según la querella.
Los 42 involucrados se enfrentan a penas de prisión que oscilan entre los seis meses y los cuatro años. Entre ellos figuran el capitán del Atlético de Madrid Gabi y el jugador del Manchester United Ander Herrera.