Un juez federal ordenó la suspensión definitiva de dos órdenes de aprehensión emitidas por autoridades de Veracruz en contra el exgobernador del estado, Javier Duarte de Ochoa, por cinco delitos del fuero común que son catalogados como no graves.
La juez Primero de Distrito de Amparo en materia Penal en la Ciudad de México confirmó en definitiva la suspensión de las órdenes de aprehensión dictadas en las causas penales 38/2017 y 56/2017, por las que el gobierno de Veracruz solicitó su extradición.
Los delitos por los que se le giró la orden de aprehensión fueron abuso de autoridad, incumplimiento de un deber legal, peculado, tráfico de influencia y coalición.
Esta suspensión no implica la liberación del exgobernador quien permanece internado en el Reclusorio Norte y que enfrentará su proceso federal por lavado de dinero y delincuencia organizada.
La juez Sandra Leticia Robledo Magaña ordenó que los jueces de Veracruz tienen un plazo de tres días para establecer la fecha en la que, vía videoconferencia, se realizarán las audiencias iniciales por estas dos acusaciones.
El 22 de julio Javier Duarte de Ochoa fue vinculado a proceso por los delitos de delincuencia organizada y de operaciones con recursos de procedencia ilícita entre 2011 y 2016.
La Procuraduría General de la República (PGR) presentó contra el exgobernador de Veracruz 82 datos de prueba, de los cuales la defensa del exmandatario asegura que dos se tratan de testigos clave y los otros 80 “son humo” al no estar relacionados con la conducta de Duarte de Ochoa.
Para argumentar su apelación, la defensa de Duarte señaló que a su criterio no se cumplían los requisitos legales que el Código Nacional de Procedimientos Penales contempla para que se vinculara a proceso a Duarte por delincuencia organizada y lavado de dinero.