Cerca de 600 trabajadores del Poder Judicial en Aguascalientes, al igual que en las otras 31 entidades federativas de México, se unieron al paro nacional de labores para expresar su rechazo a la reforma propuesta por el presidente López Obrador, en la que se contempla la elección de magistrados y jueces mediante voto popular.
En las sedes de salida a Calvillo y Segundo Anillo Sur, cientos de trabajadores colocaron mantas y carteles para exigir el respeto a la división de poderes, que consideran estaría en riesgo si se aprueba la reforma. Sus exigencias son:
- Un diálogo con la bancada de Morena y sus aliados.
- Ser escuchados por los legisladores y el presidente de la República
“Inminentemente el paro tenía que realizarse para poder negociar. Necesitamos que se sienten a escucharnos, pues nosotros los trabajadores, en viva voz, somos quienes tenemos las mejores opciones para plantear lo mejor para esta reforma al Poder Judicial” declaró Luis Miguel Comte Loera, oficial judicial y miembro de la coordinación de trabajadores.
Los manifestantes reconocen la necesidad de una reforma judicial, pero consideran que la propuesta actual no aborda las verdaderas problemáticas de justicia en el país. En un comunicado nacional, los 32 circuitos judiciales llamaron a sindicatos, colectivos de búsqueda, organizaciones civiles, universidades, entre otros grupos, a sumarse a estos esfuerzos.
“Conscientes de la necesidad de una reforma integral que beneficie a todas y todos los ciudadanos, la base trabajadora intentó por diversos medios agotar la vía del diálogo para exponer las razones del por qué la reforma judicial en México es perjudicial y no resuelve los problemas de justicia, sin que nos hayan escuchado” dicta el comunicado.
Los trabajadores acordaron mantener un paro parcial e indefinido hasta que sean escuchados, atendiendo únicamente asuntos urgentes, principalmente en materia penal.