A LAS 8:30 horas del 14 de agosto, hora local, un terremoto de magnitud 7.2 sacudió los departamentos de Grande Anse, Nippes y Sur, en el sur de Haití. El epicentro se registró a unos 12 kilómetros al noreste de Saint Louis-du-Sud y a unos 125 kilómetros al oeste de la capital, Puerto Príncipe. Las regiones del sur del país son las que han sufrido los daños más graves.
Numerosas viviendas e infraestructuras, incluidas las instalaciones médicas, han resultado destruidas y dañadas en las provincias del sur. Algunos hospitales han tenido que evacuar a sus pacientes y otros carecen de equipos médicos y medicamentos.
Por otro lado, las previsiones meteorológicas anuncian la llegada de una tormenta tropical, Grace, a las zonas afectadas por el terremoto, lo que se traduciría en intensas lluvias. Los datos meteorológicos prevén entre 10 y 18 centímetros de lluvia en la isla. Las carreteras ya están dañadas por los corrimientos de tierra provocados por el terremoto y las réplicas, y las fuertes precipitaciones podrían dificultar aún más la entrega de la ayuda y empeorar las condiciones de vida de quienes han perdido sus hogares.
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El colapso de carreteras y puentes complica ya el acceso de los equipos de rescate locales a las poblaciones aisladas. En Port-a-Piment, por ejemplo, la carretera de Labei está cortada del resto del departamento y el camino de Les Cayes a Jérémie también está bloqueado. Los cortes complican la distribución de suministros y el traslado de pacientes. Varias instalaciones médicas clave del sur del país han sufrido graves daños y su capacidad de funcionamiento se ha visto muy afectada, incluidos dos de los principales hospitales de Les Cayes.
La primera prioridad es estabilizar a las personas heridas y trasladarlas a infraestructuras sanitarias operativas. Los centros sanitarios se enfrentan a la escasez de suministros, medicamentos y sangre para transfusiones. Para las personas sobrevivientes que han sido desplazadas, las principales necesidades son refugio, agua y alimentos, ropa y artículos de primera necesidad.
LA RESPUESTA DE MSF EN GRAND ANSE, NIPPES Y SUD
A las pocas horas del terremoto, un equipo con base en Port-à-Piment y un equipo médico de urgencias de Puerto Príncipe empezaron a asistir a los pacientes heridos en el departamento Sur. El hospital de Port-à-Piment, donde brindamos atención en materia de salud sexual y reproductiva, resultó dañado. Las pacientes, que en su mayoría recibían atención materna, fueron evacuadas a un hospital de campaña donde el equipo de MSF sigue prestando atención. En Port-à-Piment también estamos estabilizando a los pacientes heridos por el terremoto.
En Port-Salut, nuestro equipo recibió al menos a 16 pacientes con heridas y fracturas, incluyendo pacientes remitidos desde Port-à-Piment y Les Cayes. En Les Cayes, un equipo proporciona suministros médicos y personal para trabajar en el hospital general.
Estamos evaluando las necesidades en la localidad más remota de Les Anglais y hemos trasladado pacientes desde Les Anglais a Port-a-Piment y otras zonas. Los vehículos no pueden recorrer todo el camino hasta Les Anglais por el momento, por lo que los pacientes deben ser trasladados entre dos vehículos diferentes, lo que dificulta especialmente su derivación.
Un equipo llegó el 15 de agosto a Nippes y visitó el hospital Sainte-Thérèse de Miragane, que ha recibido a 59 personas heridas. Hemos donado suministros al hospital, y un cirujano y una enfermera de MSF están prestando apoyo médico. Otro equipo está evaluando la situación en Baradères y Petit Trou, en Nippes.
También hemos enviado suministros de emergencia desde Puerto Príncipe a Sur (botiquines de primeros auxilios, tiendas de campaña para clínicas de emergencia, medicamentos y suministros para transfusiones de sangre y material para traumatología). Algunas vías de acceso, como la carretera entre Les Cayes y Jérémie, están muy dañadas y complican el despliegue de la ayuda. Sin embargo, un equipo que incluye dos cirujanos y una enfermera de quirófano, llevó material médico a Jérémie ayer 15 de agosto y está trabajando en el hospital de la ciudad.
Tenemos previsto reforzar nuestras actividades en los próximos días, enviando más equipos médicos, incluidos cirujanos. Estamos preparando el envío de material médico y de emergencia, incluyendo dos aviones de carga desde Bruselas.
EN PUERTO PRÍNCIPE
En Médicos Sin Fronteras estamos tratando a las personas heridas en nuestro hospital de traumatología de Tabarre. El mismo día del terremoto, seis personas heridas del sur fueron ingresados en este centro. Para hacer frente a la posible escasez de sangre, lanzamos el 14 de agosto una campaña de recogida de sangre en el barrio de Turgeau de Puerto Príncipe, en colaboración con las autoridades locales. El 15 de agosto abrimos un centro de urgencias en el barrio de Turgeau y empezamos a prestar atención de estabilización a los pacientes heridos.
MSF EN HAITÍ
Médicos Sin Fronteras estamos presentes en Haití desde hace 30 años. Nuestras actividades regulares continúan, incluso en el hospital de Tabarre en Puerto Príncipe, donde tratamos a pacientes con quemaduras graves, así como a personas con lesiones que ponen en peligro su vida.
También prestamos atención materna y de salud sexual y reproductiva en Port-a-Piment, en la provincia del Sur de Haití, y tratamos a las víctimas de la violencia sexual y de género en Puerto Príncipe y Gonaïves.
Tras más de 15 años, nos vimos obligados a cerrar nuestro centro de urgencias de Martissant, en Puerto Príncipe, después de que un grupo armado disparara contra las instalaciones el 26 de junio, poniendo en peligro al personal médico y a los pacientes. A principios de año, debido a la inseguridad, trasladamos el hospital de quemados de Drouillard a Tabarre. N
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Médicos Sin Fronteras (MSF) es una organización médico-humanitaria de carácter internacional que aporta su ayuda a poblaciones en situación precaria y a víctimas de catástrofes de origen natural o humano y de conflictos armados, sin ninguna discriminación por raza, religión o ideología política.