Los estudiantes habían quedado de iniciar la marcha “Una luz por Ayotzinapa” este 22 de Octubre a las seis de la tarde, pero mucho antes de eso ya se encontraban reunidos en las escalinatas del Ángel de la Independencia, con pancartas, telas, fotografías, instrumentos musicales y velas
Alrededor de 40 escuelas se declararon en paro para este miércoles 22 y jueves 23 de octubre en apoyo a los 43 normalistas desaparecidos en Iguala, Guerrero y de sus familiares.
La marcha comenzó en el Ángel de la Independencia y de ahí, más de 50 mil personas, en su mayoría estudiantes, caminaron hacia el Zócalo capitalino.
En los rostros de la gente se podía ver enojo y tristeza, pero sobretodo se notaban las ganas de hablar, de hacer algo. Los estudiantes pedían justicia y lo hacían con gritos, porras y cantos.
“Vivos se los llevaron y vivos los queremos,” ese fue el motor de la marcha que encabezaban los padres de los estudiantes desaparecidos el pasado 26 de septiembre en Guerrero.
Algunas de las escuelas que marcharon fueron las facultades de Arquitectura, Filosofía y Letras, Economía, Psicología, Ciencias Políticas y Sociales: la Escuela Nacional Preparatoria plantel 2, 4 y 9; la unidad de Posgrado de la UNAM, la Universidad Autónoma de la Ciudad de México en 5 campus; La Escuela Nacional de Antropología e Historia y el Claustro de Sor Juana.
La caminata duró muy más de cuatro horas, en las que hubo gritos y llantos, en los rostros de la gente se podía ver la desesperación y el miedo de que cualquiera de esos estudiantes podría ser el desaparecido.
A los costados de la marcha se encontraban cientos de personas que tomaban fotografías y daban apoyo a los estudiantes con pancartas y porras.
Al llegar a la plancha del Zócalo los familiares de las víctimas se acomodaron en un templete frente a Palacio Nacional, cada uno tenía en sus manos una fotografía de su hijo desaparecido.
Una vez que la mayoría de los estudiantes llenaron el Zócalo comenzó el pase de lista. Un compañero de los normalistas leía los nombres de los desaparecidos y todos en el Zócalo gritaban “presentación”, exigiendo así que el estudiante fuera presentado con vida.
Al final se nombraron a los tres normalistas que perdieron la vida en los hechos del 26 de septiembre, ahí la gente gritaba “justicia”.
Entre las demandas de los normalistas y de todos los estudiantes que marcharon con ellos están: que se haga justicia por los hechos ocurridos ese día en Iguala, la dimisión del gobernador de Guerrero, Ángel Aguirre, el endurecer la búsqueda de los normalistas y la desaparición de poderes en el estado de Guerrero.