La Colonia Anáhuac, localizada a 12 kilómetros de su cabecera municipal (Cuauhtémoc), a un costado de la Laguna de Bustillos, fue blanco de otro cruento hecho delictivo, en el cual dos personas murieron –uno de ellos, policía municipal—, mientras la comandancia quedó rafagueada, además de una patrulla calcinada.
El pánico de los habitantes saturó ayer las redes sociales, se transmitían alertas sobre el camino que tomaron los atacantes y las características de los vehículos, en los que se desplazaba el grupo armado.
Nunca acabará uno de acostumbrarse, subrayó uno de los usuarios en Facebook. Y es que precisamente, no es la primera vez que Anáhuac es zona de enfrentamientos.
Apenas el 4 de abril pasado, integrantes de la comunidad menonita que habitan en esa área, exponían en el Congreso Nacional de Mediación cómo la violencia había alcanzado a un sector de su demarcación, impactado de manera importante en la vida diaria de los integrantes de las colonias asentadas en todo el estado.
Comentaron que incluso, desde hacía tiempo se vieron en la necesidad de contratar el servicio de una empresa privada, que se encargaba de realizar rondines en brechas de los campos menonitas, luego de la insuficiencia de unidades y elementos policiacos que forman parte de la Dirección de Seguridad Pública Municipal.
Anáhuac se ubica en un punto geográfico que ha sido generoso en cuanto a recursos naturales, es un lugar de pesca, ganadería, agricultura, comercio e industria. Gran parte de sus habitantes trabaja en el corredor comercial Cuauhtémoc – Álvaro Obregón.
Como en toda la zona noroeste del estado, Anáhuac, no ha quedado fuera de las redes de delincuencia, aportando a la cifra de Cuauhtémoc, desaparecidos y ejecutados, como el asesinato de uno de los líderes de Morena, Jesús Moncada Campos, quien aspiraba a ser Presidente Seccional de Anáhuac, pero un grupo armado lo ultimó a balazos justo afuera de su domicilio en septiembre del año pasado.
Lo que acabó de romper la tranquilidad en el Seccional, fueron los minutos de pánico que vivieron sus habitantes ayer martes, cerca de las 9:35 de la noche cuando un comando incendió una patrulla y disparó en múltiples ocasiones contra la comandancia municipal y algunos negocios colindantes.
Como resultado, el comisario del Mando Único, Abraham Castañeda, informó que fueron dos las personas que perdieron la vida en el ataque. Uno estaba detenido y se encontraba en las celdas de la comandancia, al momento que la estación policíaca fue rafagueada. De hecho, se estableció que la cantidad de disparos provocó que se incendiara una patrulla de la Policía Municipal. No se dio a conocer la identidad de la víctima, sólo se indicó que falleció por respirar el humo.
Simultáneamente, se reportó el asalto a mano armada en el expendio Modelorama, situado en Anáhuac y al llegar los oficiales, fueron recibidos a balazos por los delincuentes. En el lugar, murió el oficial Marco A. Ramos Soto.
A través de redes sociales, los habitantes compartieron videos y testimonios del trayecto en que se desplazaba el convoy armado en varias camionetas, ya que algunos ciudadanos se aventuraron a asomarse para comprobar que al menos, ya se habían dado a la fuga y podían salir de sus domicilios.