Por Ariel Arrocha, director de LATAM en USA
Desde que asumió la presidencia, Donald Trump ha implementado una serie de políticas alineadas con sus promesas electorales, basadas en su convicción personal sobre lo que considera mejor para su país. Está claro que gran parte de su electorado comparte esta visión, como lo demostró el escrutinio. Ahora bien, muchas de estas medidas han generado incertidumbre sobre cómo afectarán a nuestros países. Sin embargo, si las analizamos con calma, podemos ver que presentan tanto desafíos como oportunidades para nuestra región.
En primer lugar, las nuevas tarifas sobre el acero y el aluminio han tenido un impacto significativo en las exportaciones industriales de varios países latinoamericanos. Trump anunció un arancel del 25 % para las importaciones de estos materiales, lo que ha complicado directamente la comercialización de estos productos. No obstante, esta medida también ha impulsado la necesidad de fortalecer nuestras propias industrias, mejorar la eficiencia y buscar nuevos mercados para nuestros bienes.
Otra medida importante ha sido la Ley Laken Riley, que ha generado un intenso debate sobre la inmigración. Esta normativa introduce cambios en la aplicación de las normas migratorias, estableciendo la detención obligatoria de migrantes indocumentados acusados de ciertos delitos. Aunque su objetivo es frenar la inmigración ilegal, este es un tema que deberían abordar seriamente todos los países de la región. Claro está que cumplir la ley es fundamental, pero no basta con eso.
Nunca mejor dicho: “Dentro de la ley, todo; fuera de la ley, nada”. No solo Estados Unidos, sino también muchos de nuestros países se han visto perjudicados por la inmigración indocumentada. Al mismo tiempo, hay migrantes honrados y honestos que llegan buscando mejores condiciones de vida y terminan siendo maltratados o explotados por no tener documentación, mientras que otros llegan con intenciones no tan buenas. Estos últimos suelen aprovecharse de la vulnerabilidad de quienes, como ellos, han vivido la odisea y el riesgo de migrar clandestinamente. La comunidad internacional debe velar, en conjunto, por fortalecer las políticas migratorias y asegurar que las comunidades sean seguras y prósperas.
CREATIVIDAD FRENTE A LAS POLÍTICAS DE TRUMP
A pesar de estos desafíos, es crucial mantener una perspectiva optimista. Las políticas proteccionistas de Trump han incentivado a muchos empresarios e inversionistas, tanto en Estados Unidos como en Latinoamérica, a ser más eficientes y creativos, además de buscar nuevas oportunidades. La clave está en la adaptación y la innovación. Con una visión pragmática y un enfoque en el desarrollo sostenible, podemos transformar estos desafíos en oportunidades de crecimiento.
En conclusión, aunque las medidas de Trump presentan muchos desafíos, también han abierto puertas a nuevas oportunidades. Es nuestra responsabilidad aprovecharlas y trabajar para construir un futuro más próspero para Latinoamérica y México.