Lia Thomas, Hailey Davidson, Laurel Hubbard y Stephanie Barrett son algunas de las atletas transgénero que han participado en eventos deportivos y que actualmente figuran en la lista de SheWon.org, un sitio creado para documentar los “logros de las deportistas femeninas que fueron desplazadas por los hombres en competencias expresamente para mujeres”.
Esa base de datos está alineada con el decreto firmado por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, que prohíbe a los atletas transgénero participar en competiciones femeninas. Sin embargo, ¿por qué este tema sigue generando tanta controversia?
De acuerdo con SheWon, de 2018 a 2025 más de 750 mujeres cisgénero (personas cuya identidad y expresión de género coincide con el sexo) han perdido aproximadamente 1,086 medallas en 528 competencias de 40 deportes distintos frente a mujeres transgénero (individuos que fueron asignados hombres al nacer).
“Un día no muy lejano esperamos que sus logros sean reconocidos formalmente”, pormenoriza el inicio del sitio.
Para la investigadora y exprofesora de Política deportiva y actividad física en la Universidad de Cumbria (Ingalterra), Cathy Devine, “no hay largas listas de logros de hombres transgénero en el deporte masculino”.
Incluso, “aquellos que se identifican como no binarios” suelen competir en categorías femeninas. Por esa razón, sostiene que al final “los hombres asignados con ese sexo al nacer siguen queriendo ocupar y estar por encima de nosotras, aunque ellas después cambien su género”.
“¿DÓNDE ESTÁN LAS LARGAS LISTAS DE ÉXITOS DE LOS HOMBRES TRANSGÉNERO EN EL DEPORTE MASCULINO? “
Para ejemplifica este fenómeno social, en un hilo de X (antes Twitter), Devine recordó el caso de la futbolista canadiense Quinn, la primera persona transgénero no binaria en participar en la Copa del Mundo Femenil.
Female non-binary footballer Quinn widely lauded as the 1st transgender athlete to win Olympic gold, and female non-binary athletes BMX rider Chelsea Wolfe & skateboarder Alana Smith, qualified for the Tokyo 2021 Olympics in their female sex appropriate categories. No issue. 11/
— Cathy Devine (@cathydevine56) January 27, 2025
Desde 2014 esta atleta forma parte de la Selección de Canadá Femenil y en 2020 dio a conocer su transición a pronombres no binarios, así como una mastectomía (cirugía para extirparse los senos). En Tokio 2020 logró el oro junto a su equipo, marcando un hito para la comunidad LGBTQ+ dentro de los Juegos Olímpicos.
“La futbolista no binaria Quinn fue ampliamente elogiada como la primera atleta transgénero en ganar el oro olímpico, y las atletas no binarias Chelsea Wolfe, ciclista de BMX, y Alana Smith, patinadora, se clasificaron para los Juegos Olímpicos de Tokio en sus categorías correspondientes al sexo femenino”, comentó la investigadora en su perfil de X.
Y agregó al tema: “¿Dónde están las largas listas de éxitos de los hombres transgénero en el deporte masculino? (…) Encontrar hombres trans que hayan triunfado en la categoría masculina es casi imposible y solo dos son referenciados con frecuencia, Chris Mosier y Patricio Manuel”.
ATLETAS TRANSGÉNERO: EL CASO DE LOS HOMBRES TRANS EN EVENTOS DEPORTIVOS
En contexto, Chris Mosier es una de las figuras trans más influyentes en la historia del deporte. Nacida como mujer, comenzó a competir en las categorías femeninas en 2005, disputando el triatlón por primera vez en 2009. No fue hasta 2010 cuando decidió una reasignación de género. Años después, en 2015, se unió al equipo masculino Duatlón Print Team USA para el Campeonato Mundial 2016.
En tanto, Patricio Manuel inició su tratamiento de conversión de mujer a hombre en 2014. Antes de su transición, fue cinco veces campeón nacional estadounidense de boxeo amateur en la división femenina. Ya como hombre transgénero debutó profesionalmente en diciembre de 2018 contra Adán Ochoa.
“¿A qué se deben las sorprendentes diferencias en las tasas de éxito entre los hombres transgénero que deciden competir en deportes masculinos y las mujeres transgénero que compiten en eventos femeninos? Todo el mundo lo sabe, por supuesto”, reflexionó Cathy Devine.
Una de las atletas más controvertidas de Estados Unidos actualmente es Lia Thomas, a quien incluso han nombrado el “rostro del debate de las mujeres transgénero en los deportes”.
Thomas pasó a la historia el 17 de marzo de 2022 al convertirse en la primera persona transgénero en ganar un campeonato en EUA en la historia de la División I. Emma Weyant, quien es mujer cisgénero y ganó plata en los 400 metros combinados individuales en los Juegos Olímpicos de Tokio, terminó 1.75 segundos por detrás y en segundo lugar.

No obstante, solo cinco días después de la competencia, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, firmó una declaración para reconocer a Weyant como la ganadora de la competencia celebrada en Georgia. La postura del funcionario, según BBC, solo hizo avivar las dudas de muchos: ¿hasta qué punto un atleta transgénero tiene ventaja sobre sus contrincantes?
EN LA VOZ DE LOS EXPERTOS: ¿QUÉ OPINAN SOBRE LOS ATLETAS TRANSGÉNERO?
Joanna Harper, atleta transgénero y asesora del Comité Olímpico Internacional (COI), ha recurrido a su experiencia personal y a su labor como investigadora científica para analizar este dilema. En una entrevista con el medio británico BBC, relató que inició su terapia hormonal para la transición en 2004. Sin embargo, semanas después, “empezó a darse cuenta de que era notoriamente más lenta y luego de nueve meses de terapia estaba corriendo un 12 por ciento más lento que antes”.
Según un estudio hecho por RunRepeat, los hombres corren maratones un 11 por ciento más rápido que las mujeres. En esa vía, respecto al atletismo, el estudio más reciente de Harper, publicado por el British Journal of Sports Medicine, encontró que los niveles de hemoglobina (la proteína que transporta el oxígeno en la sangre por el cuerpo) en las mujeres transgénero alcanzan niveles equivalentes a los de las mujeres biológicas. Esto después de aproximadamente cuatro meses de terapia hormonal.
No obstante, su estudio también concluyó que la masa corporal y la masa muscular de las mujeres trans se mantenía por encima de la de las mujeres biológicas hasta como mínimo unos 36 meses (tres años) después de haber comenzado con las hormonas.
“Estoy a favor de proteger las categorías femeninas. Si revisas los últimos 100 años, verás que el aumento de las categorías femeninas en el deporte es uno de los componentes más importantes en la lucha de las mujeres por la igualdad con los hombres. El Comité Olímpico Internacional solo incluyó mujeres a partir de los Juegos de 1928 en Ámsterdam, y en ese momento solo participaron en cinco eventos”, señaló Joanna Harper a BBC.
UNA NUEVA CATEGORÍA: INTERSEXUALIDAD
A pesar de su respuesta, la investigadora se guía bajo una postura de igualdad. Por lo anterior, en 2019 asesoró al COI sobre cómo podría funcionar este tema en el futuro. En palabras de la atleta transgénero, en vez de dividir en categorías binarias de hombres y mujeres, podría haber una división por niveles de testosterona: niveles altos o bajos.
En teoría, esto incorporaría a atletas intersexuales, como la atleta sudafricana de larga distancia Caster Semenya, quien tiene niveles naturalmente altos de testosterona, y a la boxeadora argelina Imane Khelif.
Khelif fue una de las dos boxeadoras presentes en París 2024 que fallaron una prueba de género en 2023 debido a sus elevados niveles de testosterona. Cuando la argelina se subió por primera vez al cuadrilátero de París vio cómo su rival, la italiana Angela Carini, tiraba la toalla después de solo 46 segundos de combate. Incluso el sitio SheWon.org incluye a Carini en la lista de mujeres deportistas desplazadas por un hombre.

¿QUÉ DICE LA CIENCIA?
Según la Biblioteca Nacional de Medicina de Estados Unidos, citada por Animal Político, la testosterona es una hormona producida por los testículos, la parte del sistema reproductor masculino responsable de generar esperma. Sin embargo, esta hormona también es producida por los ovarios, que forman parte del sistema reproductor femenino y producen óvulos. De igual manera, es producida por las glándulas suprarrenales, que se encuentran encima de cada riñón y generan diversas hormonas.
Por lo tanto, es incorrecto afirmar que tener testosterona en el cuerpo implica ser hombre. De hecho, la testosterona es importante para las mujeres, ya que contribuye al crecimiento de huesos y músculos, y al mantenimiento de órganos sanos.
Pero existen varias razones por las cuales una mujer puede tener niveles elevados de testosterona. Uno de ellas es el síndrome de ovario poliquístico, el cáncer de ovario y un trastorno de la glándula suprarrenal.
“Soy consciente de que la categoría ‘mujer’ es muy importante para muchas mujeres. Lo que sería ideal es si pudiéramos encontrar una manera de integrar a las atletas trans en los deportes femeninos de una manera equitativa para todos”, concluyó Joanna. N