Los trabajadores del Poder Judicial Federal (PJF) en León, no esperaron al encuentro con los legisladores federales electos de Morena para manifestar su rechazo a la Reforma Judicial propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador. Advirtieron que se pretende dar certeza de justicia, despreciando la carrera judicial.
Acusaron que lo que en realidad busca es someter al único poder que se ha constituido como un verdadero contrapeso del gobierno.
“Somos incómodos porque desde el más alto de los peldaños de la carrera judicial, se han dictado sentencias que han venido a limitar su poder”.
Sus protestas continuaron este domingo con un pronunciamiento inicial frente a la sede del PJF, en el bulevar Adolfo López Mateos a las 10 de la mañana. Minutos antes de las 11 de la mañana, los portavoces del movimiento se dirigieron al Arco de la Calzada de los Héroes, donde ya lo esperaba otro grupo de trabajadores y sus familias sumando más de 500 personas.
Caminaron por la calle Madero rumbo al Jardín Principal de León, donde sentenciaron que la propuesta de reforma judicial constituye un grave peligro para todo México, pues le costará a nuestro país graves problemas en materia de inversiones, turismo, fuga de capitales, pero sobre todo a los ciudadanos, quienes tienen el derecho de contar con jueces imparciales, independientes y preparados.
“Esta reforma es perversa porque está disfrazada de tener un fin legítimo; una mejor administración de justicia se sostiene en un discurso de odio donde se incita la violencia por medio de expresiones donde se nos denosta, ridiculiza, estigmatiza y descalifica desde una tribuna con alcance nacional, a la que nosotros no tenemos acceso, mucho menos experiencia”, señaló el Juez cuarto de distrito, Ulises Fuentes Rodríguez.
Advirtió que están en medio de un discurso en el que pregona que los integrantes del Poder Judicial de la Federación son quienes provocan todos los males sociales que aquejan al país y que al sustituir a sus titulares, se logrará el cometido dejando de fuera aquellos funcionarios judiciales que conforman el escalafón de la carrera judicial.
“La reforma no es una solución idónea, aunque en principio no suene tan mal. Que los ciudadanos voten por las personas ya que así elegimos al Presidente de la República, a los gobernadores, a los diputados y a los senadores. Lo cierto. Es que esto último se hace para representar ideologías e intereses de la comunidad que los eligió a diferencia de las personas juzgadoras”, agregó.
Expresó que son especialistas en diversas ramas del derecho a cuyo cargo han accedido a través del sistema de carrera judicial que se rige bajo los principios de independencia, imparcialidad, objetividad, profesionalismo y excelencia, recorriendo diversas categorías hasta alcanzar los conocimientos y la experiencia suficiente previa aprobación de rigurosos exámenes.
“Si bien el Poder Judicial de la Federación tiene áreas de oportunidad por las que deben mejorar, ello no es pretexto para desmantelar. Tiene sus propios procedimientos para solucionar a quienes incurren en irregularidades. Además (la reforma) no hace una propuesta seria e integral ya que parte de la falacia es que una persona aspirante a ser Juzgadora, al ser elegida por el método propuesto, será la ideal”.
Agregó que si lo que se pretende es una mejor administración de justicia, eso no se logra al despedir injustificadamente a sus titulares, cuya formación radica en años de experiencia jurisdiccional en la que los ciudadanos han invertido a través de sus impuestos, “se deja decapitada la institución y por ende, desprotegidos a los justiciables”.
Paro de labores seguirá
Por su parte, la juez tercera de distrito Gabriela Elizeth Almazán Hernández expuso que la suspensión de labores seguirá a nivel nacional, aunque trabajando de forma presencial y remota atendiendo asuntos urgentes en todas las áreas del derecho.
“Lo anterior lo hacemos con fundamento en la Constitución, en los tratados y en las sentencias de la Corte Interamericana que citamos en el oficio de 20 de agosto de este año. La finalidad de esta suspensión de labores es la de exigir al Congreso de la Unión que detenga el actual proceso de reforma”.
Resaltó que se tiene todo un sexenio para plantear la mejor reforma judicial que merece México. Por lo que cuestionó la prisa para la elección de personas juzgadoras “por voto popular o por una tómbola con un mínimo de requisitos para llegar a esos puestos”.
“Pasemos a la historia como aquellos ciudadanos que lucharon por hacer todo lo humanamente posible para preservar la democracia que tanto nos ha costado construir a todos los ciudadanos mexicanos. Hagámoslo con valentía, con fe en Dios por amor a nuestros hijos y a nuestra patria ¡que viva el Poder Judicial de la Federación!”, exclamó la juzgadora.