Se desató una polémica después de que se diera a conocer que Édgar González Zataráin, alcalde de Mazatlán, realizara durante la temporada decembrina un viaje a Hawái, esto debido a que su ciudad es un destino turístico que enfrenta diversos problemas en servicios públicos como derrames de aguas negras, baches, problemas de alumbrado y deficiencia en la recolección de basura, mismos que han sido ignorados.
En conferencia de prensa, Édgar González Zataráin, reconoció que sí viajó a dicho destino paradisiaco, pero aclaró que lo hizo en días inhábiles y solamente pasó unas horas, sin que esto representara un cargo a las finanzas del municipio.
“No me fui de vacaciones, pero si fui a una boda junto a mi esposa e hija a Honolulú, Hawái, y pague con recursos propios”.
Si bien esto no representa un acto ilícito, diversos sectores le cuestionaron que dejará el país en medio de la recepción de una importante afluencia turística con motivo de las festividades de Fin de Año.
Sobre todo porque Mazatlán fue catalogado por la COFEPRIS como una de las seis playas más contaminadas del México, en espacial la playa de Olas Altas, la cual superan los límites de contaminación establecidos por la Organización Mundial de la Salud (OMS), debido a descargas directas de aguas negras crudas, situación que regula la Junta Municipal de Agua Potable y Alcantarillado.
Cabe recordar que la Comisión Federal de Electricidad recientemente cortó el suministro de energía a dicho organismo debido a una deuda de 12 millones de pesos.
Por último, el alcalde aseguró que se fue a escondidas y no lo publicó porque no era viaje de trabajo, era tema familiar.