A dos meses y medio de su puesta en marcha, la Policía Violeta, mediante llamadas de emergencia y reportes, ha brindado 372 atenciones de manera directa a mujeres que se encontraban en alguna situación de violencia.
Después de que el 18 de noviembre del año pasado comenzó el despliegue de agentes, este nuevo modelo de atención a féminas tiene una cobertura de 50 por ciento en el territorio estatal, pero el objetivo es que todas las regiones cuenten con una unidad de dicho ente.
Anabel Serrano Hernández, directora operativa de la Policía Violeta, explicó que, anteriormente, tenían únicamente corporaciones concentradas en la zona metropolitana de Pachuca para atender las agresiones contra las mujeres; sin embargo, la intención es ampliar la cobertura.
“No nos sentimos orgullosos de ello, pero la violencia familiar es la conducta antisocial que va a la cabeza de la incidencia delictiva; entonces, el compromiso es que se pueda contar con una unidad en todos los municipios”, explicó.
Por ahora, los reportes de estos hechos se atienden de manera regional: en la zona Pachuca se brinda respaldo a Mineral de la Reforma, Epazoyucan, Zempoala, San Agustín Tlaxiaca, Tizayuca, Villa de Tezontepec, Tolcayuca, Zapotlán, Atotonilco el Grande, Huasca, Mineral del Monte, Mineral del Chico y Omitlán, mediante 53 elementos policiales y ocho vehículos.
En cuanto a las intervenciones que se realizan, tras recibir una llamada de emergencia o incluso detectar agresiones en plena vía pública, se identifica a la víctima, que es el objetivo central, a fin de verificar si requiere atención médica o de cualquier otro tipo, con base en protocolos de actuación locales y nacionales.
Serrano Hernández destacó que se requiere empatía para comprender las circunstancias en las que vive una persona afectada, toda vez que se han registrado casos en los que previamente ya se había denunciado alguna situación que la pusiera en riesgo; no obstante, al momento deciden ya no levantar una querella.
“En estos escenarios evitamos generar un juicio, porque solo esta mujer sabe lo que está pasando y si está preparada en ese momento para dar continuidad a una queja, o, más bien, si ese perdón que le está otorgando a su agresor es un mecanismo que para ella implica supervivencia”, aseveró.
PRESENCIA LOCAL
Los municipios en los que hay presencia de estos elementos son: Pachuca, Mineral de la Reforma, Epazoyucan, Zempoala, San Agustín Tlaxiaca, Tizayuca, Villa de Tezontepec, Tolcayuca, Zapotlán, Atotonilco el Grande, Huasca, Mineral del Monte, Mineral del Chico y Omitlán
Asimismo, hay presencia de elementos de este ente en las áreas de Ixmiquilpan, Tula, Tulancingo y Actopan
“El servicio de la Policía Violeta se debe de adaptar a municipios”, considera activista
La activista Yolanda Molina Reyes consideró que, a más de dos meses y medio de haber sido puesto en operación, el modelo de la Policía Violeta debe ser adaptado a las características de cada municipio.
La abogada y especialista en temas de género recordó que los habitantes de las comunidades alejadas a la zona metropolitana de Pachuca se rigen por otras formas de organización, como el ejido y el comisariado, que ejercen decisiones y autoridad, por lo que resaltó la necesidad de amoldar el prototipo acorde a las distintas regiones.
“Siempre inquieta la parte de otros municipios porque casi siempre todo se concentra en la capital y no podemos decir que todos tienen las mismas condiciones de urbanización, por ejemplo”, explicó.
Asimismo, describió que, en cuanto a tiempos de acceso a determinada localidad o en la búsqueda de ayuda, las necesidades son distintas, por lo que la idea es que se hagan políticas que se adapten a cada región.
“Aún hay muchas comunidades que se rigen por usos y costumbres, lo que implica un trabajo continuo para poder ganar su confianza; se trata de entender el contexto y no implementar medidas generales que puedan causar más daños que beneficios”, planteó.
De forma paralela, indicó que es necesario realizar un análisis y proponer alternativas que ayuden a todas las mujeres hidalguenses, independientemente de las condiciones y características en que se encuentren.
Por otra parte, expresó que es acertada la creación de la Policía Violeta, ya que “se necesitaba cierta profesionalización” para atender casos de violencia de género.
Además, dijo que dicho modelo representa solo un “pequeño engranaje” dentro de este fenómeno, ya que, por sí sola, “no va a contribuir a disminuir esta incidencia si las políticas de prevención no se aplican de manera eficiente”.
Yuvenil Torres | Pachuca