En todo el mundo, las enfermedades crónicas matan al menos a 41 millones de personas al año. En el continente americano hay 5.5 millones de muertes por estas enfermedades en el mismo lapso, informa la Organización Panamericana de la Salud (OPS).
Las etiquetas con información nutricional en la parte delantera del envase de los alimentos pueden ayudar a reducir el número de enfermedades crónicas como la obesidad, la diabetes tipo 2, algunos tipos de cáncer y enfermedades cardiovasculares en las Américas, indica la OPS.
La apuesta de la agencia de la ONU se basa en la publicación de un estudio en la revista The Lancet sobre cómo gestionar mejor las etiquetas nutricionales en los productos. La información ayuda a los consumidores de la región a elegir mejor lo que ingieren.
La investigación fue firmada por científicos de la Universidad de Nevada, Reno y Opas. Según la agencia, los sistemas de etiquetado nutricional frontal aportan la información de forma más clara. Otros términos como “exceso” en lugar de “alto” aclaran a los consumidores lo que es realmente saludable a la hora de comprar la comida.
ENFERMEDADES CRÓNICAS ASOCIADAS CON ALIMENTOS
Conocido como Fopnl, los sistemas de etiquetado también pueden ayudar al consumidor a comprender el contenido nutricional de lo que lleva a casa. De esta forma, es más fácil reducir la ingesta de alimentos ultraprocesados y con alto contenido de grasa, sal o azúcar.
Las enfermedades cardiovasculares son responsables de la mayoría de las muertes por enfermedades crónicas en el mundo, seguidas de cáncer, enfermedades respiratorias y diabetes. Este grupo suma más del 80 por ciento de todas las muertes prematuras por enfermedades crónicas. Uno de los coautores de la investigación, Eric Crosbie, dijo que los primeros hallazgos indicaban una relación entre la mejora de la dieta y la reducción de la compra de estos productos que causan daños a la salud. De esta forma, también se hizo la prevención de enfermedades asociadas a estos alimentos.
En las Américas, los 35 países analizaron el sistema de etiquetado frontal y 30 decidieron introducirlo formalmente. Siete naciones han implementado el etiquetado: Argentina, Chile, Ecuador, México, Perú, Uruguay y Venezuela. El etiquetado también ayuda a promover la salud de las personas. Opas recuerda que los países que piensan en implementar el sistema pueden contar con el apoyo técnico para desarrollar las llamadas mejores prácticas.