En lo que va del año, en Aguascalientes se han registrado 43 homicidios dolosos según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP), teniendo un importante repunte en los meses de mayo y junio, a pesar de la contingencia sanitaria por el Covid-19.

A comparación del año anterior, la cifra es ligeramente inferior, pues de enero a junio de 2019 se contabilizaron 47 homicidios dolosos, en su mayoría ligados a las rencillas entre los grupos de la delincuencia organizada.

De los 43 homicidios dolosos ocurridos en lo que va del año, 27 fueron utilizando armas de fuego, seis con arma blanca o punzocortante y 10 homicidios más con otro elemento u artefecto.

Al respecto, el fiscal general del Estado, Jesús Figueroa Ortega, afirmó que la disminución a comparación del año pasado ha sido de hasta un 20%, derivado especialmente de la disputa de los grupos delictivos dedicados al narcomenudeo y a las acciones de la fiscalía para combatir dicho delito.

“Tenemos menos ejecuciones que las que registramos el año pasado, yo creo que entre un 15 o un 20% y puede ser debido a muchos factores, ya que el narcomenudeo no es un tema que podamos analizar de la misma manera que el resto de los hechos delictivos, debido a que se trata de una dinámica que hacen las corporaciones policíacas y la Fiscalía, e incluso quiero ser optimista y que se debe a que hemos tratado de golpear a algunos grupos, pero no podemos tener certeza de que esa sea la causa”.

El último homicidio doloso fue el ocurrido en calles de la Col. Estrella del municipio de Aguascalientes, en donde se atacó a balazos a Edgar Eduardo “N” “N” alias “El Negro”, quien fuera presunto líder de la organización delictiva “La Oficina”, que tuvo un auge importante a partir de 2007.

Sobre el tema, el fiscal general informó que se continúa avanzando en la investigación de los hechos, tanto como un posible ajuste de cuentas entre grupos delincuenciales o incluso por temas personales o familiares.

“En realidad es una situación normal, (los grupos delictivos) tienen códigos en donde privar de la vida a una persona es parte de sus estrategias, venganzas y de resolver diferencias, pero no podemos decir que sea una pelea como hemos visto en otros estados de la República, en donde estén constantemente disparando para combatir entre ellos”.

Entre los indicios también se está investigando una presunta narcomanta virtual en la que el Cártel de Sinaloa se atribuía el asesinato, agregó el fiscal.

“A comparación de otros casos en donde se han colocado mensajes físicos, en este se trató al parecer de una narcomanta virtual, nosotros no la hemos recibido como otras que sí se han colocado, sabemos de esa manta pero también no podemos establecer como cierto el que dicho grupo se atribuya el hecho y no descartamos que otro grupo o individuo haya realizado el crimen”, puntualizó.

Indicó que hacía poco tiempo había salido de prisión, luego de que fuera detenido en 2012 en Zapopan, Jalisco, por presuntamente haber participado de forma intelectual en 23 ejecuciones y cinco intentos de asesinato en contra de elementos policíacos.

“Tenemos información que tenía poco de haber salido de prisión, es un lamentable hecho siempre que se pierda una vida, y habrá que ver cuáles son las razones por las que se pudo haber privado de la vida a esta persona”, acotó Figueroa Ortega.