Un grupo de más de 20 mujeres se manifestó este miércoles en el Centro Estatal de Justicia Alternativa, en Tijuana, para exigir justicia por Mónica Bringas, Marbella Valdez, Eneyda Ramos, Melany Colio, Claudia Guareca, y otras víctimas de feminicidio en la región.
Portando carteles con los nombres y fotografías de estas jóvenes, las manifestantes reclamaron que a pesar del periodo de aislamiento social, no se han detenido los asesinatos de mujeres.
La protesta se convocó, a pesar de la pandemia, por casos recientes como el de Mónica Bringas, quien fue agredida en su casa el pasado 23 de mayo y falleció cuatro días después debido a las lesiones.
“Aun cuando no es recomendable salir, nos siguen matando, nos matan en nuestras casas, la violencia no se detiene por el confinamiento”, comentó una de las asistentes, quien solicitó anonimato.
Tijuana se encuentra en primer lugar a nivel nacional de feminicidios, según datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública, durante el primer trimestre del año.
En Baja California han sido asesinadas un total de 70 mujeres.
“Las mujeres seguimos viviendo violencia incluso en la pandemia, entonces venimos a recordarles un poco y demostrarles que el movimiento feminista no está en sus casas”, comentó una de las manifestantes.
En realidad, la violencia contra las mujeres aumentó en México a partir del confinamiento por la pandemia de COVID-19.
Al grito de “No fue crimen pasional, fue un macho patriarcal”, las manifestantes colocaron retratos de las mujeres asesinadas en el interior de las oficinas del CEJP, junto con fotos de Juan Pérez, el presunto feminicida de Marbella Valdez. Luego se dirigieron al Monumento México en Zona Río para concluir la marcha.