En las últimas elecciones federales, el 53 por ciento de la lista nominal que existe en el estado fue la que ejerció su voto. De acuerdo con registros del Instituto Nacional Electoral (INE) las elecciones con mayor participación en la entidad fueron las de 1994, cuando salieron a emitir su voto el 83.7 por ciento de las listas.
Con el análisis de estas cifras, el delegado estatal del INE en Aguascalientes, Ignacio Ruelas Olvera, declaró que los hidrocálidos suelen estar por encima de la media nacional en materia de ejercer el voto.
“El instituto está preparado para que en el caso de Aguascalientes, los más de 993 mil electores tengan su boleta, tengan un espacio dónde votar y una mesa directiva que vigilará el voto (…), además, tenemos que ubicar por mandato del consejo, una urna en un hospital para darle la posibilidad a todo el gremio que está en guardia y que no puede salir a votar, esta será una experiencia importante”, expresó.
Sin embargo, insistió en que es necesario la promoción del voto, pues de lo contrario se caería en una acción irresponsable.
“La democracia es un ejercicio colectivo y por eso es nuestra responsabilidad salir a votar, tenemos muchas decepciones y criticamos mucho acciones de gobierno, pero no vale llorar cuando nosotros lo permitimos, los ciudadanos somos responsables de aquello que hacen los políticos y los gobiernos, no se los permitamos más”.
Agregó que es primordial ejercer un voto libre pero informado, y siempre cuestionar a los candidatos y sus propuestas, pues sus discursos siempre prometen resolver problemáticas sociales pero pocas veces explican el cómo lo lograrían.
Debido a la ola de violencia que a la fecha ha resultado en el asesinato de 94 candidatos en todo México, Ruelas Olvera aseguró que ningún candidato del estado ha solicitado apoyo en materia de seguridad, sin embargo, no dudarían en pedir el respaldo de fuerzas de seguridad de ser necesario.
“La violencia tiene que ser condenada por las instituciones porque las instituciones son un entramado de normas que permiten una mejor convivencia y tiene que ser denunciado e impugnado por la sociedad para poder seguir participando de una vida compartida lo más civilizada posible”.