Nuevos detalles sobre el asesinato de Kim Jong Nam, medio hermano del líder norcoreano Kim Jong Un, emergieron este lunes durante el juicio que se lleva a cabo en Malasia contra las dos mujeres acusadas de arrojarle al rostro un agente nervioso que le causó la muerte.
El jefe de la policía investigadora, Wan Azirul Nizam Che Wan Aziz, dijo al tribunal que Kim voló de Macao, China, a Kuala Lumpur, Malasia, el pasado 6 de febrero para dirigirse dos días después a la isla de Langkawi en donde se reunió un día después con un hombre de nacionalidad coreana y estadounidense. El encuentro tuvo lugar en un hotel de Langkawi.
El agente respondió a las preguntas de Gooi Soon Seng, el abogado de Siti Aisyah, quien junto a Doan Thi Huong, es una de las dos únicas sospechosas del asesinato bajo custodia, en relación al informe del periódico japonés Asahi Shimbun sobre un encuentro entre Kim y un supuesto agente de inteligencia de EE. UU. con base en Bangkok.
“Hasta ahora, se desconoce la identidad del hombre”, dijo Wan Azirul al tribunal.
El Asahi Shimbun reportó el 13 de mayo de 2017 que las autoridades locales habían estado siguiendo al hombre coreano- estadounidense cada vez que ingresaba a Malasia, ya que se tenían sospechas de sus vínculos con una agencia de inteligencia estadounidense.
El hombre ingresó a Malasia el mismo día en que Kim llegó al país y se había reunido con Kim en Malasia varias veces en el pasado, refiere el mismo reporte.
El 9 de febrero, día en que se efectuó el encuentro, Kim y el hombre coreano- estadounidense ingresaron a una suite de un hotel alrededor de la 1 p.m. y salieron dos horas más tarde.
Un análisis de la computadora portátil de Kim mostró que se había insertado un dispositivo de memoria USB en la PC, lo que generó sospechas de que Kim le entregó un gran volumen de información que no pudo transmitir en forma oral.
Kim regresó de Langkawi a Kuala Lumpur la noche del 12 de febrero. Un día después sería atacado con un veneno en el vestíbulo del Aeropuerto Internacional de Kuala Lumpur. El ciudadano coreano- estadounidense con el que se reunió salió de Malasia el mismo día, informó Asahi Shimbun.
En relación al asesinato hay cuatro sospechosos de nacionalidad norcoreana que no han sido detenidos. Las dos mujeres que se encuentran en custodia podrían evadir la pena de muerte, si demuestran que no tenían la intención de matar a Kim Jong Nam. Los abogados defensores dicen que las mujeres creían que estaban jugando una broma para un programa de televisión con cámara oculta. Sin embargo, los fiscales sostienen que las mujeres sabían que estaban manipulando un veneno.
El abogado de Siti declaró este martes que su clienta fue presentada a un tipo llamado James – identificado luego como Ri Ji-U – en un centro comercial de la capital Kuala Lumpur el 5 de enero de 2017, cinco meses antes del homicidio. Ri Ji-U la reclutó para una broma con “cámara oculta” que resultó ser un complot de agentes norcoreanos que buscaban a dos mujeres para cometer un asesinato, explicó el abogado.
El representante legal de la otra joven dijo el lunes a la prensa que el homicidio de Kim probablemente fue un asesinato político debido a la participación de la Embajada de Corea del Norte. Según el Asahi Shimbun, un testigo de la policía ha declarado que un automóvil que llevaba a los sospechosos norcoreanos al aeropuerto el día del asesinato pertenecía a la embajada. El tribunal también escuchó que un funcionario de la embajada se reunió con los sospechosos antes de huir y facilitó su registro en el aeropuerto.