El escándalo de acoso sexual que han desatado los señalamientos de distintas actrices en contra de Harvey Weinstein ha dado paso a una serie de denuncias sobre la manera en la que se manejaba el otrora poderoso productor de Hollywood, pero también ha puesto el dedo sobre un tema que algunos actores han querido sacar a la luz desde tiempo atrás: el abuso a menores cometido dentro de la meca del cine.
La actriz Evan Rachel Wood, quien saltó a la fama gracias a su interpretación de Tracy en la película Thirteen por la cual fue nominada a diferentes premios, tuiteó el martes que la pederastia en Hollywood “será el próxima dique en romperse”. Wood hizo estas declaraciones en Twitter al difundir un artículo del sitio The Daily Beast sobre cómo los jóvenes también han sido víctimas de agresiones sexuales.
El sitio recordó las declaraciones que la semana pasada hizo, el exactor infantil Corey Feldman, conocido por su papel en Stand by Me y The Goonies, sobre que le habían pedido una declaración sobre las acusaciones de acoso contra Weinstein. Feldman ha denunciado en el pasado los abusos sexuales cometidos en Hollywood contra hombres jóvenes, una situación de la cual responsabiliza a la eventual muerte por sobredosis de su mejor amigo Corey Haim.
“[Haim] tenía más abuso directo que yo. En mi opinión, hubo molestias, y fue de varias manos, por así decirlo, pero con Corey, su violación fue directa, mientras que la mía no fue una violación real. Y también ocurrió cuando tenía 11 años. Ahora mi hijo tiene 11 años, y ni siquiera puedo comenzar a comprender la idea de que algo así le sucediera a él. Destruiría todo su ser. Cuando miro a mi hijo, un niño dulce e inocente de 11 años y luego trato de ponerlo en los zapatos de Corey Haim, digo, ‘Dios mío”, dijo Feldman, por ejemplo, a The Hollywood Reporter en 2016.
Ese mismo año, el actor estadounidense Elijah Wood, protagonista de la saga fantástica “El señor de los anillos” denunció que en Hollywood los pedófilos son protegidos por figuras poderosas de la industria del cine. El actor dijo en una entrevista con The Sun que los abusos se han producido “desde hace mucho tiempo en Hollywood” y que “probablemente” sigan sucediendo hoy en día. “Es probable que estas cosas sigan ocurriendo. Si eres un niño inocente, con poco conocimiento de este mundo y con ganas de triunfar, los parásitos te verán como su presa”, dijo.
Los abusos contra menores en la industria del cine estadounidense es hasta cierta forma un secreto a voces. El afamado director Bryan Singer ha tenido acusaciones contra él durante años. Michael Egan denunció en el año 2014 que Singer abusó de él. Egan declaró en aquel momento ante los medios de comunicación: “Eras un trozo de carne para esa gente”.
El domingo, mientras el escándalo de Weinstein continuaba desarrollándose, la actriz Evan Rachel Wood tuiteó: “Sí, no olvidemos tampoco a Brian [sic] Singer”. The Daily Beast recuerda cómo Noah Galvin, ex estrella de The Real O’Neals, fue citado en una entrevista con Vulture, eliminada desde entonces: “Sí. A Bryan Singer le gusta invitar a los niños pequeños a su piscina y los entretiene toda la noche””. La cita fue retirada y Galvin emitió una disculpa en Twitter: “Me disculpo sinceramente con Bryan Singer por la horrible declaración que hice. Mis comentarios fueron falsos e injustificados. Fue irresponsable y estúpido de mí hacer esas acusaciones contra Bryan, y lamento profundamente hacerlo”.
The Daily Beast recordó que en 1988, mientras filmaba su largometraje Clownhouse, el director Victor Salva abusó sexualmente de su estrella de 12 años. Eventualmente se declaró culpable de cinco cargos de delito grave. Sin embargo, a Salva se le ha permitido dirigir películas.
James William Van Der Beek, más conocido por interpretar a Dawson Leery en Dawson’s Creek, ha revelado sus propias experiencias de acoso sexual a manos de “hombres mayores y poderosos”. En Twitter, mediante una serie de publicaciones que ofrecían apoyo a las mujeres que habían hablado en contra de Weinstein, escribió: “He tenido mi culo atrapado por hombres mayores y poderosos, he tenido que acorralarme en conversaciones sexuales inapropiadas cuando era mucho más joven”, escribió. “Entiendo la vergüenza injustificada, la impotencia y la incapacidad para hacer sonar el silbato. Hay una dinámica de poder que se siente imposible de superar”.