La comisión de Justicia del Senado de Estados Unidos convocó al exjefe del equipo de campaña de Donald Trump, Paul Manafort, a testificar en el marco de la investigación sobre la supuesta injerencia rusas en las elecciones presidenciales del año pasado.
Paul Manafort estaba negociando con la comisión para evitar una audiencia pública y sustituirla por una entrevista privada que luego sería divulgada. Pero los responsables de la comisión anunciaron que esas negociaciones habían fracasado.
“Al igual que para los otros testigos, eventualmente estaríamos dispuestos a dispensarlo de la audiencia del miércoles si estuviera dispuesto a producir documentos y aceptara una conversación retranscrita”, declararon el republicano Chuck Grassley y la demócrata Dianne Feinstein en un comunicado.
Varias comisiones parlamentarias investigan sobre la trama rusa y se interesan en el círculo más próximo del excandidato republicano. Además de Paul Manafort, también el hijo mayor, Donald Jr., negocia para ahorrarse una audiencia pública.
El lunes, el yerno y asesor personal de Trump, Jared Kushner compareció ante la comisión de Inteligencia del Senado, donde negó haber coludido con funcionarios rusos durante la campaña a las elecciones de 2016.
Además de las comisiones legislativas, Robert Mueller, un exdirector del FBI, lidera como fiscal especial independiente una investigación sobre el caso ruso.
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(Con información de AFP)