A pesar de que el aborto es penado hasta con seis años de cárcel en Aguascalientes, mujeres de todas las edades y de todo el país piden el apoyo a una organización de Aguascalientes para interrumpir su embarazo de forma ‘clandestina’.
Las fundadoras del grupo calculan que diario atienden tres solicitudes apoyo de mujeres de todo el país.
Morras Help Morras es un sistema de apoyo sin fines de lucro fundado hace seis años en la entidad. Amparado en el derecho de acceso a la información y la libertad de expresión, informa, acompaña y, si se requiere, procura apoyo económico a mujeres que deciden terminar sus embarazos, para que lo hagan en condiciones que no pongan en riesgo su vida y su libertad.
“Pensaríamos que son de nivel socioeconómico medio-bajo, pero no. Casi todas son estudiantes de clase media, media-alta. Muchísimas de clase alta, que vienen de familias ultra católicas, ultra conservadoras y que necesitan que alguien las acompañe, aunque sea moralmente, porque sí tienen dinero para hacérselo en clínicas privadas, pero está aterradas”, asegura una de las fundadoras, que piden el anonimato
La mayoría de las mujeres que piden apoyo a la organización ha sido víctima de violencia sexual o de otro tipo. Las activistas llaman la atención sobre esta tendencia porque el Código Penal de Aguascalientes establece que en caso de que su embarazo sea producto de una violación o ponga en riesgo la vida de la madre, ésta puede pedir que se le practique un aborto en algún hospital público de forma segura y gratuita.
“Si no estás dentro de estas causales (…) nosotras damos la información para que puedan realizarse un aborto seguro, ya sea viajando a la Ciudad de México, en su propia casa con medicamentos”, detalla otra de las activistas.
Y es que, aseguran, han atendido casos de mujeres a las que los médicos de hospitales públicos se negaron a interrumpirles el embarazo, protegidos por la ley que les permite excusarse por cuestiones morales.
“Son las menos y la mayoría no quieren denunciar porque no quieren pasar por un proceso revictimizante; no confían en las instituciones. Entonces ellas prefieren abortar con nosotras o con nuestra información y olvidarse del tema”, afirman.
En general, estiman las activistas, quienes las buscan son mujeres que han sufrido violencia de cualquier tipo y cuyo motivo para abortar es evitar poner en peligro su vida y la de otro ser humano.
“Noviazgos conflictivos, violentos, en donde saben que no cuentan y que no van a contar con el hombre, con el macho, porque es un maltratador. Lo que necesitan es abortar para no agregarle una violencia más o no ponerse en riesgo y poner en riesgo a una posibilidad de vida y ponerse más en estado de vulnerabilidad. La mayoría sí están atravesando por procesos de mucha violencia, o económica o emocional”, afirma una de las fundadoras.
Morras Help Morras trabaja con organizaciones nacionales aliadas. Cuando inició, las cuatro fundadoras trabajan a través de un blog, con el apoyo de una de esas asociaciones nacionales han habilitado una línea telefónica de ayuda y obtenido recursos para apoyar a mujeres que deciden ir a la Ciudad de México a practicarse el aborto.
La única manera de contactarlas, a fin de protegerse y proteger a las usuarias es a través de su página de Facebook.