A partir del jueves 25 de agosto, las 10 piezas de bienes raíces que fueron embargadas a Javier Villareal Hernández, tesorero de Coahuila durante el mandato de Humberto Moreira, serán subastadas en Texas, según informó el diario San Antonio Express News.
La primera de 10 piezas de bienes raíces del sur de Texas, que los fiscales federales de San Antonio dicen que fueron comprados con fondos robados de los contribuyentes en un estado fronterizo mexicano, se venderán el jueves”, publicó el medio de comunicación estadounidense.
“La primera propiedad que sale a la venta el jueves – el Centro de Retail North Point 281 y Redland Drive – está valorada en 8.6 millones de dólares”, señaló el diario fronterizo.
El juicio que se realiza a Villareal continuará en octubre, cuando será sentenciado por el delito de lavado de dinero, y sólo podrá quedarse con una casa y una gasolinera con locales comerciales de todo lo que posee ahora.
“El caso contra Villareal es parte de una investigación más amplia de las autoridades estadounidenses, con denuncias de que altos funcionarios de Coahuila robaron cientos de millones de dólares del erario público durante el mandato del ex gobernador Humberto Moreira, y que además usaron crédito del Estado para obtener préstamos ilegales. También se adjudicaron contratos públicos a cambio de sobornos y lavaron decenas de millones en San Antonio y el Sur de Texas”, continuó el diario texano.
Moreira y los Zetas
El presunto operador financiero de los Zetas, Rodrigo Humberto Uribe Tapia, aseguró durante el juicio que se sigue en Estados Unidos a Marciano Millán, ex líder criminal de los Zetas en Piedras Negras, Coahuila, que el gobierno de ese estado dio contratos oficiales a este grupo criminal, según revela el San Antonio Express News en un resumen que hizo sobre el juicio de dos semanas que se hizo a Millán.
“Los Zetas evadieron arrestos sobornando a la Policía Municipal. Evadieron impuestos mediante el soborno de los funcionarios de hacienda…. Obtuvieron contratos del gobierno para sus empresas de construcción y permiso para usar la cárcel de Piedras Negras como una casa de seguridad, e incluso utilizaron helicópteros estatales para huir de la persecución de los infantes de marina mexicanos mediante el soborno a altos funcionarios en Coahuila”, testificó Humberto Uribe, de acuerdo a la información publicada en julio pasado por el diario estadounidense.
La publicación, basada en los testimonios del juicio, indica que los Zetas estaban involucrados en la minería del carbón y tenía contratos con el gobierno para pintar y renovar las escuelas y construir carreteras. “Una vez que lavaban el dinero a través de esas operaciones comerciales aparentemente legítimas, los principales líderes de los Zetas evitaban el pago de impuestos”.
Los mismos reportes dan cuenta de que un testigo federal conectó por primera vez a los Zetas con Humberto Moreira, ex gobernador de Coahuila y ex dirigente nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI) que es investigado como parte de una diligencia de EE.UU. sobre de lavado de dinero.