La mayoría de las personas que se estresan en la temporada
vacacional piensan en la molestia de tener demasiado vello ahí abajo. Esa es la
razón por la que cada vez más personas recurren a la depilación láser, que es
el tratamiento cosmético no quirúrgico más popular. Su promesa de eliminar
permanentemente el desagradable vello es una bendición para nosotros los
hirsutos.
La eliminación del folículo capilar ocurre tan rápido que la
mayoría de las personas ni siquiera piensa acerca de lo que ocurre realmente en
la superficie de su piel. Pero el nerd de la ciencia Derek Muller, anfitrión de
Veritasium, un canal educativo sobre ciencia en YouTube, pensó que estarías
interesado en dar un vistazo extremadamente más cercano.
La primera ronda del tratamiento láser que se usó en el video
tenía una longitud de onda de 1,064 nanómetros, lo que significa que se trata
de radiación infrarroja, invisible a simple vista. (También realizaron el
procedimiento con una configuración aún más alta). Su camarógrafo hizo algunos
pequeños ajustes, de manera que Muller pudiera obtener las interesantes escenas
de lo que ocurre exactamente cuando el técnico depila su bíceps.
“Parece una escena del O.K. Corral (uno de los tiroteos más
famosos del Viejo Oeste),” señala Muller.“Todos los vellos simplemente son exterminados.”
Basta devanidades;hablemosdeciencia.Todos los ojos, piel y cabellos oscuros tienen concentraciones más altas de la molécula
melanina, que proporciona el pigmento. “La melanina absorbe una amplia gama de
longitudes de onda de la luz, especialmente en la parte ultravioleta del
espectro,” afirma Muller. “Esto la convierte en un escudo ideal contra los
rayos dañinos del sol, y esa es la razón por la que nos bronceamos cuando nos
exponemos al sol.”
Se utilizan pulsos cortos de forma que la melanina absorba a luz
del láser sin afectar a la piel circundante. A eso se debe que la depilación
láser es más eficaz en las personas de pelo oscuro y piel clara.
Cuando se aplica el láser a la piel, el pelo se calienta a más de 93
grados centígrados. Esto, desde luego, quema el pelo, pero también vaporizar el
agua. “Esto infla el pelo casi como un Cheeto,” dice Muller. El desagradable
olor y el humo (¡sí, humo!) se denomina “pluma de láser.”
De acuerdo con Muller, las células se dañan cuando se exponen a un
calor de al menos 60 grados centígrados, y en ese punto, todos los distintos elementos
celulares se descomponen, un proceso conocido como desnaturalización.
Un acercamiento fotográfico extremo revela las burbujas que se
forman en el pelo. Desde luego, el láser mata el pelo que brota de la piel,
pero también usa este pelo muerto para destruir las células que conforman el folículo
que lo produce. “Es como usar el pelo para destruir el pelo,” dice Muller.
“Cuanto más caliente está, tanto más se mantiene la temperatura, tanto
más desnaturalización ocurre y tanto mayor es la probabilidad de que la célula
muera,” afirma.
Lo anterior significa, por supuesto, que si eliminas el pelo con el láser las veces suficientes, aquél nunca volverá a crecer.
A eso se debe que las personas regresen para recibir tratamientos de
seguimiento.