El hijo de una amiga, DJ, le dio tres clases particulares, y se lanzó. “No era realmente buena al principio”, admite. Entonces empezó a ir a distintos clubes para ver cómo trabajaban los profesionales.
El hijo de una amiga, DJ, le dio tres clases particulares, y se lanzó. “No era realmente buena al principio”, admite. Entonces empezó a ir a distintos clubes para ver cómo trabajaban los profesionales.