Para el gobierno federal no hay más que tres salidas para reducir el impacto de la reforma fiscal de los Estados Unidos aprobada por el Senado este miércoles: reducir impuestos para la atracción de inversiones, recortar programas sociales o solicitar una nueva deuda, así lo señaló el senador del PAN por Aguascalientes, José de Jesús Santana García.
“Es un tema complejo porque bajar impuestos y tener menos ingresos te puede llevar a dos cosas: a desaparecer programas o acciones de gobierno, habría que ver cuáles, o generar endeudamiento, que al no poder salir con todos los compromisos generados en el presupuesto se tendría que echar mano de un endeudamiento”, subrayó.
Dada la reducción del impuesto corporativo del 35 al 21% en los Estados Unidos -que favorecerá la instalación de empresas de inversión extranjera y la retención de capitales norteamericanos- el gobierno mexicano tendrá que “poner sus barbas a remojar” ya que de no tomar acciones las consecuencias económicas podrían ser considerables.
“No he visto hasta el momento ninguna reacción por parte del Ejecutivo y creo que es importante que México reaccione y que tomemos medidas de ¿qué vamos a hacer?, y en su caso presentar las iniciativas correspondientes al presupuesto y a la Ley de Ingresos”.
De las tres opciones, la más viable es la reducción de impuestos en la Ley de Ingresos como el Impuesto Sobre la Renta (ISR), pero esta disminución tendrá que ser resultado de un análisis serio por parte de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) y en su caso del Congreso de la Unión, en las modificaciones que se le tengan que hacer a la Ley de Ingresos Federal.
Dentro de las reducciones a los recursos de algunas dependencias también se tendría que considerar la opción de disminuir los privilegios y gastos corrientes de los que se puede prescindir, a fin de generar mayores ahorros al gobierno federal, añadió el legislador.
“El gobierno se debe de amarrar, el gobierno debe dejar de tener esa robustez y debe adelgazar su burocracia, no va a quedar de otra, y no lo ha hecho, y se le ha insistido pero ni así lo ha hecho…”.
En el caso de Aguascalientes, Jesús Santana, señaló que sería complicado que las inversiones extranjeras ya instaladas en la entidad puedan llevarse sus capitales a los Estados Unidos, pero sí se deberá poner atención en las inversiones que apenas están en proceso de instalarse.
“Las inversiones que ya están no se van a ir pero si no llegan más inversiones porque otro país les ofrece mejores condiciones claro que es un riesgo para todo México, incluido Aguascalientes”, indicó el legislador blanquiazul.
