Por
primera vez en la historia, investigadores de la Universidad de Sídney han
descubierto cómo almacenar luz en forma de sonido, un hallazgo que algún día
podría llevar a velocidades como de rayo en internet.
Suena
a una locura, pero he aquí cómo funciona: al momento, la información puede
viajar a la velocidad de la luz, como lo hace en los cables de fibra óptica. El
problema es que los chips de computadora actuales no pueden recuperar y
procesar información que se mueva con esa rapidez.
En
respuesta, compañías como IBM, Intel, HP y otras han gastado miles de millones
en tratar de crear un chip optoeléctrico que computaría electrónicamente, pero
usaría luz para mover información. No han tenido mucha suerte. Estos
investigadores en Sídney decidieron que, en vez de cambiar el chip, cambiarían
la información.
“Para
que [las computadoras basadas en luz] puedan ser una realidad comercial, los
datos fotónicos en el chip necesitan ser desacelerados para que puedan ser
procesados, enrutados, almacenados y se tenga acceso a ellos”, dijo Moriz
Merklein, uno de los investigadores del equipo, en una declaración publicada
por la Universidad de Sídney.
Entonces,
con esta nueva tecnología, las computadoras actuales serían capaces de procesar
datos en forma de fotones, en vez de electrones. Los datos comenzarían como
fotones que viajan a la velocidad de la luz, se desacelerarán a la velocidad
del sonido para ser leídos y procesados por un chip de computadora, y se
revertirán a la velocidad de la luz. Funciona mediante permitir que los datos
entren al chip de computadora como un pulso fotónico de luz e interactuar con
otro pulso para producir la onda de sonido que almacena los datos. Otro pulso
de luz tiene acceso a los datos sónicos y los convierte de nuevo en luz.
“La
información en nuestro chip en forma acústica viaja a una velocidad de cinco
órdenes de magnitud más lenta que en el dominio óptico”, dijo la Dra. Birgit
Stiller, investigadora docente de la Universidad de Sídney. “Es como la
diferencia entre el trueno y el relámpago”.
En
cuanto esta tecnología esté lista para convertirse en una realidad comercial,
las computadoras tendrán todos los beneficios de los datos entregados a la
velocidad de la luz, más allá de la velocidad. Estas computadoras tampoco
generarán calor o chuparán energía como los dispositivos actuales, por lo que
no te quemarán las piernas después de horas de trabajo. Pero también sería lo
bastante lenta para que los chips de computadora actuales puedan leer de verdad
la información.
“Este
es un importante paso adelante en el campo del procesamiento de información
óptica ya que este concepto cumple con todos los requisitos para los actuales y
la generación futura de sistemas de comunicación óptica”, dijo el investigador
Benjamin Eggleton en una declaración publicada por la Universidad de Sídney.