A menos de un día después de que la elección de 2016 fue concedida a Donald Trump, New Balance expresó públicamente lo que podría interpretarse como apoyo para el próximo presidente de Estados Unidos. En una declaración publicada en The Wall Street Journal, Matt LeBretton, vicepresidente de asuntos públicos de la compañía bostoniana de calzado deportivo, dijo sentir que las cosas se “moverán en la dirección correcta” en cuanto Trump suceda al presidente Obama.
El entusiasmo de New Balance radica en la oposición de Trump al acuerdo Transpacífico, al cual la compañía se ha opuesto desde hace mucho. Cuando Obama visitó a la competidora Nike en 2015, LeBretton dijo que “sería grandioso verlo acudir a una compañía de calzado que de verdad todavía hace tenis en Estados Unidos”. New Balance es de las pocas compañías de calzado que fabrican en Estados Unidos, produciendo en masa 4 millones de tenis al año. El ATP reduce las tarifas para las compañías que fabrican fuera de EE UU, colocando a New Balance en desventaja.
En abril, LeBretton criticó a Obama de nuevo, esta vez en un artículo del Boston Globe que acusó al Pentágono de retirarse de un acuerdo para dotar a las tropas con tenis New Balance. “Nos tragamos la píldora venenosa que es el ATP para que pudiéramos tener una oportunidad en estos contratos”, dijo él. “Nos aseguraron que este sería un enfoque de arriba abajo en el Departamento de Defensa si aceptábamos apoyar o mantenernos neutrales ante el ATP. [Pero] las posibilidades de que el Departamento de Defensa compre tenis que están hechos en EE UU son casi nulas mientras Obama sea presidente”.
New Balance había hecho tenis que le permitirían al gobierno cumplir con una enmienda de 1941 la cual evita que el Departamento de Defensa suministre las tropas con ropa, comida y otros artículos que no sean producidos en EE UU.
No sorprende que LeBretton apoye a un presidente electo que se opone al ATP, pero expresar este apoyo públicamente un día después de la elección tal vez no haya sido una acción sabia. Pocas horas después de que se hicieron públicos sus comentarios, dueños de tenis New Balance en contra de Trump no fueron tímidos en expresar cómo se sentían.
Ya se hace una idea.
Con la respuesta negativa a todo lo que da, New Balance aclaró su postura a Sole Collector, cuyo tuit se convirtió en el hogar de videos de protesta con fuego y cubos de basura. “Siendo la única compañía importante que todavía hace calzado atlético en Estados Unidos, New Balance tiene una perspectiva única del comercio y la política comercial en la que queremos hacer más calzado en Estados Unidos, no menos”, dijeron. “New Balance apoyó públicamente las posturas comerciales de Hillary Clinton, Bernie Sanders y Donald Trump antes del día de la elección que se enfocaban en la creación de empleos fabriles estadounidenses y continuamos apoyándolas hoy”.
New Balance también confirmó a BuzzFeed que sus comentarios fueron “en el contexto del comercio”.
No hay nada de malo en que New Balance se oponga al ATP, por supuesto, pero dado cuán reñida fue esta elección y cuán ansiosa está la mitad del país de expresar su frustración con los resultados, a LeBretton no puede sorprenderle que a los productos de su compañía se le apliquen algunos encendedores.