El Congreso ha aprobado una
serie de estímulos fiscales, incluido el regreso del 25 por ciento del valor
del automóvil, mientras que las motocicletas eléctricas y bicicletas deducirán
impuestos con el objetivo de promover la movilidad sostenible en la Ciudad de
México.
La iniciativa fue propuesta
para reducir la contaminación en las grandes ciudades y para hacer el
transporte ecológico más accesible. Con 441 votos a favor, 42 en contra y una
abstención, el documento fue aprobado y enviado al Senado de la República para
ser revisado y finalmente aprobado.
Asimismo, las compañías
tendrán acceso a un crédito fiscal de hasta 30 por ciento para llevar a cabo la
instalación de equipos de alimentación de este tipo de vehículos.
De acuerdo con la Asociación
Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA), hasta ahora se han vendido 3,700
automóviles eléctricos, tan sólo el 43 por ciento en la CDMX.
Por otro lado, para las
empresas con menor capacidad también se reducirá la carga administrativa
asociada al cumplimiento tributario. Mientras que el retiro ahora se podrá
realizar de forma colectiva y no sólo individual.
En cuanto a los hidrocarburos,
los diputados introdujeron por primera vez un opción de pago denominada Impuesto
Especial sobre Producción y Servicios (IEPS, un gravamen que incluye a los
combustibles) que se administrará a través de bonos de emisiones de carbono.
Acerca de la importación de
bienes, cuando la entrega material se haya efectuado en el extranjero, el
cálculo del impuesto será el monto de las contraprestaciones. “No se pagará el
gravamen por el uso o goce temporal en territorio nacional de bienes entregados
en el extranjero por no residentes del país, cuando por dichos bienes se haya
pagado efectivamente el IVA por la introducción al país”, de acuerdo con el
documento presentado por los diputados.