LIMA.— El gobierno de la presidenta Dina Boluarte agravó las tensiones diplomáticas con seis países de América Latina en medio de la ola de protestas sociales que se registran en Lima y regiones del sur de Perú.
Ayer, el Ministerio de Relaciones Exteriores informó que se llamó a consulta a los embajadores de Perú en Argentina, Colombia, Bolivia y México. En un comunicado, publicado en sus redes sociales, explicó el motivo de la decisión que agudiza la relación diplomática entre los cinco países.
Según el pronunciamiento, la Cancillería peruana mencionó que se debe a las “declaraciones que cuestionan la sucesión presidencial realizada en estricto apego a la Constitución del Perú y no se condicen con los tradicionales lazos de amistad, cooperación y respeto mutuo que unen a nuestros países”.
“Se seguirá dando muestra de su amplia voluntad para profundizar el diálogo, siempre en el marco del respeto mutuo y de la plena vigencia del derecho internacional”, agrega en otra parte de la misiva.
¿CÓMO SE VE PERÚ EN AMÉRICA LATINA?
“En el Perú existe pleno respeto a los derechos humanos, al debido proceso y a la separación de poderes, y se garantiza el acceso de todos nuestros ciudadanos a una justicia independiente”, cierran.
La postura de Perú llega días después de haberles enviado sendas cartas de protesta a los embajadores de Colombia y Bolivia por las intervenciones que tuvieron los presidentes Gustavo Petro y Luis Arce en el manejo del gobierno de Dina Boluarte de las manifestaciones sociales que llevan más de un mes.
El sábado pasado, Petro escribió en su cuenta de Twitter para criticar al contingente policial que desalojó a la fuerza a cientos de manifestantes que estaban ubicados en la Universidad de San Marcos de Lima. “Allanar universidades. Gritar ¡Muera la inteligencia! El Consejo Permanente de la OEA debe ser citado para examinar el caso de Perú”, escribió.
Mientras que Arce indicó, el último domingo, en una actividad en La Paz que “tenemos al pueblo peruano en una lucha por recuperar su democracia”. Y, dijo, “también por recuperar su derecho a elegir un gobierno que los represente”.
CONFLICTO CON CHILE
Además, la Cancillería también le hizo mostrar su incomodidad al embajador de Chile en Perú. Ello tras las palabras que el presidente, Gabriel Boric, tuvo en la cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac). En dicho foro, el mandatario chileno indicó que no se podía ser indiferente la crisis que hay en el país.
“No podemos ser indiferentes cuando hoy día en nuestra hermana república de Perú, con el gobierno bajo el mando de Dina Boluarte, personas que salen a marchar, a reclamar lo que consideran justo, terminan baleadas por quienes deberían defenderlas. Más de 50 personas han perdido la vida y eso nos debería escandalizar”, sostuvo.
DISOLUCIÓN DE RELACIONES CON HONDURAS
Este jueves 26 de enero se conoció que el gobierno peruano retiraba a su embajador en Honduras. Ello tras las declaraciones de la presidenta Xiomara Castro en la Celac.
“El Gobierno ha retirado definitivamente al embajador del Perú en Honduras en respuesta a la inaceptable injerencia en asuntos internos de la presidenta Xiomara Castro en su intervención en la Celac desconociendo al gobierno constitucional de la presidenta Dina Boluarte”, escribió.
“Como consecuencia de la posición adoptada por Honduras, las relaciones bilaterales con dicho país se mantendrán, de manera indefinida, a nivel de encargados de negocios”, cierra el breve comunicado.
Durante su intervención en la cumbre de países de América Latina, la presidenta Castro condenó el “golpe de Estado” en Perú. Asimismo, mostró su “solidaridad” con Pedro Castillo, a quien consideró el presidente “legítimo, electo” de ese país. Además, solicitó su inmediata libertad debido a que cumple 18 meses de prisión preventiva.
Tras la decisión de Lima, el canciller hondureño, Enrique Reina, indicó que su gobierno “es respetuoso de la autodeterminación de los pueblos y la no injerencia en asuntos internos de otros estados”.
“Y en respeto a esa autodeterminación, considera que en el Perú se violentó la voluntad soberana del pueblo que eligió al presidente Castillo. Una serie de hechos generaron una conspiración para derrocarle vía un golpe de Estado, el cual condenamos al igual que la represión que ha provocado más de 50 muertos. Exigimos la liberación inmediata del presidente Castillo. Se debe respetar la democracia y el voto popular”, cerró el pronunciamiento. N
