Por Cristina Maza
La palabra redneck [rústico, zafio, pueblerino] solía usarse para insultar a una persona blanca con antecedentes pobres y rurales, una demografía que tiende a ser políticamente conservadora. Pero ahora, un grupo de activistas de extrema izquierda ha reclamado el término y lo está usando para desatar un movimiento de la clase trabajadora que promueve la justicia social y protege a las minorías.
El sitio Web Redneck Revolt afirma que pretende “devolver el rojo a redneck”, una referencia al uso del color rojo para representar a los comunistas y a otros miembros de la extrema izquierda.
Igual que los grupos de vigilantes comunitarios que asistieron al mitin Unite the Right en Charlottesville, Virginia, a menudo es posible encontrar a los miembros de Redneck Revolt en manifestaciones, y armados hasta los dientes. Pero, en vez de proteger a los supremacistas blancos de la extrema derecha, los miembros de Redneck Revolt brindan protección a los grupos minoritarios, como Black Lives Matter y otras agrupaciones que luchan por la igualdad y la justicia.
Se trata de una red nacional de proyectos para defensa comunitaria que, a diferencia de muchas personas de la izquierda, aboga por el derecho de portar armas. Desde su fundación, en 2016, el grupo afirma que han germinado alrededor de 45 ramas de Redneck Revolt en más de 30 entidades federales de Estados Unidos. Y su objetivo es responder al repunte de la retórica extremista y a la violencia provocada por los grupos supremacistas blancos durante este año.
“El ambiente político actual ha propiciado que las milicias armadas intimiden a las personas que van a orar en sus mezquitas, que los nacionalistas blancos violentos ataquen a la gente en las calles, que los nazis clamen abiertamente por el genocidio en todo el país, y que los políticos piensen que el nacionalismo blanco es una ideología política defendible”, declaró el grupo en un comunicado de prensa enviado aNewsweek.
El documento agrega: “Los miembros de Redneck Revolt reconocen cuán reales se han vuelto las amenazas de violencia, debido a los amigos y seres queridos que han perdido, y organizan la defensa comunitaria como una obligación y un compromiso de defenderse mutuamente”.
Con todo, la organización no solo se centra en las armas. También pretende unificar a los miembros de la clase trabajadora de todos los grupos raciales. Sus actividades incluyen donaciones de ropa y comida, agricultura y jardinería, así como proporcionar entrenamiento en seguridad y supervivencia.
“[Redneck Revolt] es una organización pro-trabajadores y antirracista dedicada a liberar a la clase trabajadora de los sistemas opresivos que dominan nuestras vidas”, afirmó el grupo.
También asegura que tiene miembros que representan una amplia diversidad de ideologías políticas, incluidos libertarios, anarquistas, comunistas e independientes. No obstante, los miembros comparten el objetivo de combatir la expansión de los movimientos supremacistas blancos, y de desarrollar la solidaridad entre los distintos miembros de la clase trabajadora y los pobres.
En una carta abierta que el grupo utiliza para conseguir reclutas, Redneck Revolt pide a los blancos de clase trabajadora que piensen en las minorías con las que suelen trabajar codo a codo y reflexionen en sus intereses compartidos.
“Redneck Revolt cree que la verdadera solidaridad de la clase trabajadora resultará de trabajar personalmente unos con otros y de nuestras vidas cotidianas, no de las estériles conversaciones de privilegio en las aulas universitarias ni de los falsos escrúpulos de los políticos”, añadió el grupo.
A fin de impedir que los nacionalistas blancos sigan reclutando a la clase trabajadora para sus movimientos, los miembros de Redneck Revolt visitan exposiciones de armas, mercados de pulgas, ferias estatales, carreras NASCAR y exhibiciones de ganado donde se sabe que las organizaciones de supremacistas blancos buscan nuevos integrantes.
“Nos centramos en combatir el reclutamiento de otras personas de clase trabajadora por parte de las organizaciones supremacistas blancas y nacionalistas blancas, mediante el contacto directo en lugares donde la gente de clase trabajadora ya está siendo abordada”, concluyó el grupo.
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Publicado en cooperación con Newsweek / Published in cooperation with Newsweek