Un gran incendio forestal en Saltillo y altas temperaturas ponen en alerta a los servicios de emergencia, por lo que se han emitido recomendaciones para evitar repercusiones y atender los siniestros reportados provocados por las condiciones atmosféricas.
Desde la tarde del sábado pasado, un incendio fue reportado por la Secretaría del Medio Ambiente del Estado de Coahuila en el ejido San Juan de la Vaquería, el cual corresponde al municipio de Saltillo, por lo que desde el momento, brigadistas y elementos de seguridad se presentaron para combatirlo.
En un principio se reportó la afectación de 80 hectáreas, mientras que el incendio continuaba avanzando hacia el norte de 20 a 30 km/h. Se informó que el incendio y su comportamiento se deben a las condiciones atmosféricas y a los objetos combustibles que se encuentran en el lugar.
Para la tarde del domingo se reportó que el 40% del incendio había sido controlado con ayuda de brigadistas de la Sedena, Comisión Nacional Forestal (Conafor), Protección Civil y Profauna, además de voluntarios. No obstante, también se indicó que que, para la tarde de ayer, el incendio ya había consumido 310 hectáreas.
Esta mañana, el gobernador Miguel Ángel Riquelme se presentó en la zona del siniestro para evaluar los daños, donde reconoció también el trabajo de los involucrados e informó que se presentarán en el lugar dos helicópteros para colaborar con el combate al incendio. Se precisó que estas aeronaves son rentadas.
Mientras tanto, y ante la intensa ola de calor y las condiciones atmosféricas que prevalecen en el estado, también Protección Civil señaló que se esperan temperaturas que oscilen entre los 36 y 38°C como máximas y los 20 y 21°C como mínimas para las próximas 72 horas, según reportes del Servicio Meteorológico Nacional.
Ante esta situación, la Secretaría de Salud del estado señaló que el mayor riesgo ante estas condiciones es sufrir un golpe de calor, por lo que pidió a los coahuilenses estar atentos ante síntomas como dolor de cabeza, vértigo, náusea, pérdida de conciencia, alta temperatura del cuerpo, piel enrojecida o caliente, respiración y pulso débil, además de consumir abundante agua y reforzar las medidas de prevención en menores de cinco años y adultos mayores.
También puedes leer: Opinión | Crisis ecológica