La aerolínea española Vueling volvió a defender este viernes su decisión de desembarcar a un grupo de adolescentes franceses de confesión judía durante un vuelo de regreso a París, insistiendo en que la medida se tomó “únicamente por motivos de seguridad”. La compañía respondió así a las acusaciones de discriminación religiosa presentadas por la asociación Club Kineret, organizadora del campamento de verano al que asistieron los menores.
El incidente ocurrió el miércoles 23 de julio, cuando 44 adolescentes y varios adultos, que fungían como monitores, fueron obligados a abandonar el vuelo VY8166 que despegaba desde Valencia hacia París. La noticia generó una ola de indignación en redes sociales y declaraciones cruzadas entre la aerolínea y los organizadores del viaje.
“Durante el vuelo VY8166, un grupo de adolescentes adoptó un comportamiento disruptivo y una actitud de confrontación, e infringió lo dispuesto en el artículo 41 de la Ley 21/2003 de Seguridad Aérea”, reiteró Vueling en un comunicado oficial difundido el viernes.
Actualización – Comunicado de Vueling en relación con el desembarque por comportamiento conflictivo en el vuelo VY8166 pic.twitter.com/ksAFHogFeW
— Vueling Airlines (@vueling) July 25, 2025
Según la aerolínea, los pasajeros involucrados manipularon equipos de seguridad a bordo, lo que representó un riesgo directo para el resto de los ocupantes del avión. Entre las acciones detectadas por la tripulación se incluyen intentos de retirar chalecos salvavidas, máscaras de oxígeno e incluso un cilindro de alta presión, además de interrumpir la demostración obligatoria de seguridad.
“El comandante se vio obligado a solicitar la intervención de la Guardia Civil”, explicó la empresa, tras varios intentos fallidos de contener el comportamiento con advertencias verbales.
“Reiteramos que el desembarco de los pasajeros se realizó únicamente por motivos de seguridad”, subrayó la aerolínea.
ACUSACIONES DE VIOLENCIA Y DISCRIMINACIÓN
La versión de Vueling fue cuestionada por la asociación Club Kineret, que calificó el incidente como un acto de “brutalidad injustificada” y anunció que presentará una denuncia por violencia física, psicológica y discriminación por motivos religiosos. La abogada del grupo, Julie Jacob, declaró que sus clientes no incurrieron en ningún comportamiento inapropiado y que el trato recibido fue “claramente sesgado”.
Escándalo en vuelo: Director del campamento de verano Kinneret fue arrestado tras insultar a España, y 50 niños franco-israelíes corearon “Muerte a los árabes” en un vuelo de @vueling , agredieron a la tripulación y escupieron a un pasajero que dijo “Palestina libre”, según… pic.twitter.com/y5NJk6zuyD
— Los Otros Judíos 🇵🇸 #StoptheGenocide (@losotrosjudios) July 24, 2025
Sin embargo, la Guardia Civil española emitió un comunicado que refuerza la versión de Vueling. En él asegura que el grupo mostró una “actitud altamente disruptiva” y que en ningún momento los agentes tuvieron conocimiento de la confesión religiosa de los pasajeros desembarcados.
VUELING, REFERENTE DE LA AVIACIÓN EUROPEA
Este incidente ha puesto a Vueling en el centro del debate internacional, pero también ha reavivado la discusión sobre la seguridad aérea y los protocolos disciplinarios en vuelos comerciales. Fundada en 2004 y con sede en Barcelona, Vueling forma parte del grupo International Airlines Group (IAG), uno de los conglomerados aéreos más importantes de Europa, junto a British Airways, Iberia y Aer Lingus.
La aerolínea es un actor clave en la conectividad aérea del sur de Europa, con una extensa red que abarca más de 100 destinos en Europa, África y Medio Oriente. Vueling ha sido reconocida por su modelo de bajo costo combinado con estándares operativos sólidos, lo que la posiciona como una de las aerolíneas más relevantes del continente en términos de volumen de pasajeros y presencia en aeropuertos clave como Barcelona-El Prat y París-Orly.
A pesar de la controversia, la compañía reafirmó su compromiso con los más altos estándares de seguridad y anunció que continuará investigando lo ocurrido en el vuelo VY8166, con base en sus protocolos internos y las leyes vigentes en materia de aviación civil.
En un contexto donde la seguridad a bordo es prioridad absoluta para la industria aérea, el caso Vueling pone de relieve el delicado equilibrio entre la protección de los derechos individuales y la responsabilidad de las aerolíneas de garantizar vuelos seguros para todos los pasajeros. N
(Con información de AFP)