Tras un reciente “sondeo” interno aplicado por el Congreso del Estado de Aguascalientes para revisar las tareas y funciones del personal, trabajadores sindicalizados interpusieron una queja ante la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), al considerar esta medida como una forma de presión derivada de rumores sobre posibles despidos.
Al respecto, el diputado panista, Adán Valdivia López, presidente del Comité de Administración del Congreso, explicó que este ejercicio formó parte de un análisis técnico sobre el funcionamiento de las distintas áreas del Poder Legislativo y aclaró que la decisión sobre posibles ajustes de personal no es individual, sino colegiada, aunque aún no se ha tomado una resolución definitiva.
“Entre los 27 diputados se ha planteado si hacer recortes o modificaciones. Es un tema que se dialoga todos los días, porque el presupuesto es de todos y las decisiones se ponen sobre la mesa”, señaló.
Valdivia reconoció que entre los legisladores se ha planteado la posibilidad de realizar ajustes al personal, aunque aclaró que no se ha definido una medida concreta.
“Se han puesto sobre la mesa varias decisiones. Estamos obligados a revisar el presupuesto y el funcionamiento del Congreso, pero también a dar certeza laboral a quienes cumplen con su trabajo”, dijo.
Cuestionado sobre si los recortes podrían afectar tanto a trabajadores de base como de honorarios, el diputado respondió que, en general, “todos estamos obligados a hacer nuestro trabajo y asumir responsabilidades”, pero insistió en que cualquier resolución dependerá del consenso del Congreso.
“Somos un órgano colegiado. Podrá haber opiniones a favor o en contra dentro del grupo, pero cualquier decisión que se tome, yo la acataré”, agregó.
Actualmente, el Congreso local cuenta con 69 trabajadores sindicalizados y cerca de 200 empleados de confianza, incluidos asesores, personal administrativo y de servicios parlamentarios.