En el último año, marcado por la pandemia del Covid-19, alrededor de 60 comercios formales tuvieron que bajar sus puertas y cortinas de forma definitiva por falta de solvencia económica, así lo informó el vicepresidente de la Cámara Nacional del Comercio (CANACO) y ex presidente de la Asociación de Comerciantes del Centro (ACOCEN), Alfonso Linares Medina.
Dicha cantidad equivale a cerca del 30% de los comercios afiliados a la ACOCEN, lo que significó un duro golpe para el comercio formal de la zona.
“Nosotros registramos hasta un 30% de cierre de comercios en el centro, estamos hablando de las personas afiliadas a nuestra asociación, estamos hablando de 200 negocios afiliados y de los que cerraron estamos hablando de casi 60 negocios”.
Al día de hoy, aunque las ventas siguen bajas, sin tener la recuperación esperada, poco a poco se ha ido retomando la confianza de los consumidores para que regresen a consumir de forma física, por lo que se espera que en los próximos meses se pueda tener un repunte en los ingresos económicos.
“La gente está regresando, los negocios con todos los protocolos sanitarios que el Instituto de Servicios de Salud (ISSEA) nos ha impuesto y nos seguimos manteniendo en esos elementos, para poderles brindar a los clientes y usuarios esa seguridad de que son comercios seguros”, afirmó.
Aunado a esto, durante la pandemia se logró impulsar el comercio digital o electrónico, lo que permitió sacar a flote a algunos de los comercios que tuvieron mayores problemas para continuar con su dinámica económica.
“Vino a ayudarnos, no son las ventas que esperamos, pero para las empresas que siguen vigentes les ha permitido mantenerse y poder cubrir sus costos y sus gastos y seguir pensando en el futuro, desarrollando tecnologías y preparándose de lleno para incorporarse al comercio digital”.
Por ello, comentó que algunos establecimientos han continuado con la implementación de plataformas y aplicaciones tecnológicas para detonar sus ingresos económicos, mientras que otras empresas paulatinamente siguen avanzando en el tema.
“Por el tema de la pandemia los negocios tuvieron que adaptarse a una nueva realidad y tuvieron que implementar plataformas y sistemas digitales para poder incorporar el comercio electrónico, eso aceleró el proceso de implementación, que quizás se iba a tardar unos tres años, pero que con la pandemia se pudo acelerar de una manera espectacular y hoy vemos como los comercios han dado impulso a las redes sociales y han creado sus propias plataformas tecnológicas”, concluyó.