El rey emérito Juan Carlos de España, habría estado involucrado en una operación de pago de comisiones y evasión fiscal, en una operación inmobiliaria en el complejo turístico de Ciudad Mayakoba, construido por OHL en la década de los 90s en Playa del Carmen, Quintana Roo.
Por ley, los reyes no pueden ser investigados en España; aunque esta operación de alrededor de 4.2 millones de euros, se supo porque las autoridades suizas, declararon al primo del rey, Álvaro de Orleans, quien declaró a la fiscalía suiza, que Juan Carlos creó una empresa “fantasma” para triangular los recursos.
La transnacional de la construcción OHL ha sido investigada desde hace tiempo por corrupción, y en México se adjudicó grandes contratos recientemente bajo el gobierno de Enrique Peña Nieto.
El escándalo de la monarquía española no es nuevo, sin embargo, aunque los medios han ventilado las corruptelas, la Constitución española protege a los monarcas. Pero en Suiza si se abrió una investigación por corrupción y evasión fiscal.
El Presidente Andrés Manuel López Obrador criticó que los medios españoles hablen más de él como Presidente y no presenten la corrupción española, sin embargo, políticos de España consideraron un “exabrupto” las declaraciones del gobernante mexicano, de quien dijeron que no es la primera vez, y que siempre los populista buscan un enemigo exterior, para no ocuparse de los problemas internos.