El gobierno de México pidió al de Estados Unidos investigar el uso de armas no letales por parte de personal oficial contra migrantes hondureños en los hechos del pasado domingo 25 de noviembre en la frontera con Tijuana.
La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) dio a conocer que una nota diplomática con la petición fue entregada este lunes a la Embajada de Estados Unidos.
En ella, además manifiesta “su compromiso de continuar protegiendo en todo momento los derechos humanos y la seguridad de las personas migrantes”.
No obstante, enfatizó que mantiene su interés por trabajar en conjunto y con responsabilidad compartida el fenómeno migratorio que prevalece en la frontera sur de estados unidos y el norte de México.
El domingo pasado, unos 300 refugiados hondureños que permanecían en el albergue Benito Juárez iniciaron una manifestación con mantas con mensajes pacíficos y de agradecimiento a las dos naciones.
Sin embargo, de camino a la garita internacional de El Chaparral donde harían plantón, el contingente se dispersó ante el bloqueo de agentes de la Policía Federal mexicana.
Grupos de migrantes se dirigieron a diversos puntos de la valla divisoria e intentaron ingresar a Estados Unidos, pero agentes en unidades de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza lo impidieron disparando balas de goma y gas lacrimógeno mientras estaban en territorio mexicano.