El exempleado de Google que encendió el debate sobre el sexismo en Sillicon Valley al justificar el bajo porcentaje de las mujeres en la industria de la tecnología presentó una demanda colectiva que acusa al gigante tecnológico de discriminar a hombres blancos conservadores.
James Damore fue despedido de la empresa californiana luego de publicar un “manifiesto” como memorando interno en el que cuestionaba los beneficios de los programas de diversidad y sugería que había “diferencias biológicas” que marcaban la falta de paridad en las empresas de tecnología.
Cinco meses, los abogados de Damore y otro ingeniero que trabajó en Google, David Gudeman, respondieron con una demanda en conjunto que dice representar a empleados que dicen haber sido discriminados debido a sus “opiniones políticas conservadoras”, por su “género masculino” y por su “raza caucásica”.
Según la demanda presentada el lunes en el Tribunal Superior de Santa Clara de California y publicada por TechCruch, la empresa ha señalado, maltratado y despedido empleados que expresan puntos de vista que desafían a la mayoría en Google.
Esta demanda, que busca reparación monetaria, no monetaria y punitiva, dice que Google emplea “cuotas ilegales para llenar sus porcentajes de mujeres” y que ha favorecido a candidatos que representan minorías.
La filtración del manifiesto a mediados del 2017 generó primero una ola de indignación por quienes acusaban sexismo y por otros que señalaban a la empresa de coartar el derecho a la libertad de expresión, casi sagrado en Estados Unidos.
