De acuerdo con el Índice Global de Brecha de Género 2017
presentado por el Foro Económico Mundial el pasado 2 de noviembre, en México
las disparidades entre hombres y mujeres se han profundizado en el último año, particularmente
en la dimensión relativa a la participación económica, en la que nuestro país ocupó
la posición 124 entre un total de 144 países evaluados, mientras que en 2016 se
situado en el lugar 122 del ranking.

PENOSO RETROCESO

En el ranking mundial del Índice Global de Brecha
de Género 2017, México pasó este año de la posición 66 a la 81, lo que
significa que nuestro país aún tiene mucho por hacer para mitigar la desigualdad
entre hombres y mujeres, pues a este ritmo le tomará en promedio 100 años
cerrar la brecha. Hasta la fecha, se registra 68% de avance

Ya en 2015, el Informe Latinoamericano sobre Pobreza y Desigualdad, elaborado por
el Rimisp-Centro Latinoamericano para el Desarrollo Rural, revelaba que en
la región había estancamientos e incluso retrocesos en materia de igualdad de
género, en particular por “las desiguales posibilidades que tienen las mujeres
para generar ingresos de manera autónoma y de participar en el mercado
laboral”.

En efecto, según los
datos del Panorama Laboral 2016 de la Organización Internacional del Trabajo, en
México la tasa participación laboral de las mujeres es tan solo de 43.4, en
contraste con el 77.7 de los hombres. Además, de acuerdo con la Encuesta
Nacional de Ocupación y Empleo (ENOE), elaborada por el Instituto Nacional de
Estadística y Geografía, al segundo trimestre del año la tasa de desocupación
de mujeres fue de 3.65, mientras que la de hombres fue de 3.34.

Trabajan igual, ganan menos 

En Guanajuato, el
porcentaje de mujeres de más de 15 años que actualmente se encuentra ocupada es
de 37.9% (916 541), cifra que coloca a la entidad por debajo de la media
nacional que es de 38.1%.

Un dato que debe destacarse es el relativo a la
paridad salarial, pues constituye uno de los temas centrales en la lucha por la
igualdad económica entre hombres y mujeres. A nivel nacional, de acuerdo con
información de la ENOE al segundo trimestre de 2017, del total de personas
ocupadas, 42% gana apenas hasta 2 salarios mínimos, y al hacer la desagregación
por sexo se observa que la brecha por ingresos está a favor de los hombres con
36% que percibe hasta dos salarios mínimos frente al 50% de las mujeres que no
rebasan ese nivel de ingreso.

En Guanajuato, el promedio estatal de personas
ocupadas que ganan menos de dos salarios mínimos por su trabajo fue de 39% al
cierre del segundo trimestre de 2017. Es decir, el indicador se ubica por
debajo de la media nacional, lo mismo ocurre con el porcentaje de hombres que
perciben menos de dicho ingreso que es de 33%.

No obstante a lo anterior, el indicador para las
mujeres se mantiene muy similar al nacional con 49%, y además, al analizar su
evolución se encuentra que, al menos desde el primer trimestre del año 2005, el
porcentaje de mujeres que recibe menos de dos salarios mínimos en el estado ha
superado, en la mayoría de las ocasiones, la media nacional.

Adicionalmente, debe subrayarse que, de acuerdo con
la información más reciente de la ENOE, en Guanajuato, del total de mujeres
ocupadas, 5.3% no recibe ingreso alguno por su trabajo, frente a 3.6% de los
hombres en la misma situación.

Violencia hasta en el trabajo

Datos de la Encuesta Nacional sobre la Dinámica de las Relaciones en los
Hogares (ENDIREH), 2016 revelan que en Guanajuato la violencia en el trabajo se
suma a las condiciones de desigualdad que viven las mujeres en este ámbito.

Del total de mujeres guanajuatenses de 15 años y más que han trabajado,
más de 248 mil han experimentado situaciones de violencia laboral a lo largo de
su vida: 187 mil de ellas vivieron violencia física o sexual y 156 mil
violencia emocional.

Tan solo en los últimos 12 meses antes del levantamiento de la citada
encuesta, 95,600 mujeres de la entidad afirmaron haber enfrentado hechos
violentos en el trabajo, en más de 71 mil casos la violencia fue física o
sexual.

La discriminación por razones de embarazo es otro tipo de violencia que
las mujeres han tenido que enfrentar en el ámbito laboral. De acuerdo con la
ENDIREH, 2016, más de 118,800 mujeres en la entidad reportaron haber vivido
esta situación.

Finalmente, debe destacarse que la prevalencia de la violencia laboral
que han experimentado a lo largo de su vida las mujeres de más de 15 años en
Guanajuato es mayor en el ámbito urbano que en el rural, pues el indicador
alcanza 26.6% en el primer caso y 21.7% en el segundo.