
Tu cuerpo sabe que el día tiene 24 horas, y su ritmo circadiano lo refleja. Duermes de noche –lo ideal, casi siempre a la misma hora- y despiertas durante el día. Las arañas tejedoras de orbes también tienen relojes internos, pero lo extraño en ellas es que parece que no saben que el día tiene 24 horas, pues reinician sus relojes con intervalos mucho más cortos.
Durante la reunión anual de la Sociedad para la Neurociencia, un equipo de investigadores presentó sus hallazgos sobre los ritmos circadianos de las arañas tejedoras de orbes, y revelaron que sus ritmos circadianos son más cortos que el de cualquier otro animal jamás estudiado.
Hay 3,122 especies de arañas tejedoras de orbes, pero los investigadores solo estudiaron un total de 18 especies de arañas y de ellas, solo tres eran tejedoras de orbes. Las otras especies de arañas tenían relojes internos normales, de 24 horas. En cambio, los ciclos de las tejedoras de orbes fueron de 17.4, 18.5 y 19 horas, respectivamente, según informan en Science News. Esto significa que las arañas se vuelven inactivas a distintas horas cada día, y no dependen de la rotación de la Tierra para decidir cuándo van a ponerse a hacer sus cosas.
Hasta ahora, ningún otro animal ha exhibido un ritmo tan abigarrado en su reloj interno. Animales, plantas, hongos y hasta las bacterias observan un ciclo de 24 horas, conocido también como ritmo circadiano, reloj interno de 24 horas, o ciclo sueño-vigilia. Esto es lo que te mantiene despierto durante el día y te hace dormir por la noche (y quizás, te tiene aturdido alrededor de las 2:30 p.m.). O bien, si trabajas de noche y duermes durante el día, tu cuerpo puede acostumbrarse a ese horario.
“Los relojes circadianos evitan que caigamos en el caos”, dijo Darrell Moore, neurobiólogo de East Tennessee State University en Johnson City, en una declaración paraScience News. “En teoría, [las arañas] no debieran existir”.
Las arañas no necesitan levantarse temprano para ir a trabajar, propiamente dicho, pero tienen momentos de actividad e inactividad. Los animales realizan sus tareas cotidianas de buscar comida, comer, evitar depredadores y aparearse, ocasionalmente. Las tejedoras de orbes suelen comer en sus telarañas al finalizar su día y luego, tejen una telaraña nueva para no tener que lidiar con los desechos que se han acumulado. Las distintas especies son singularmente coloridas, y su nombre hace referencia al hecho de que la telaraña es circular.
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