Humberto Moreira Valdés, exgobernador del estado de Coahuila, remitió una declaración escrita ante la Fiscalía de la Corte Penal Internacional para ponerse a su disposición y rebatir las acusaciones en su contra por crímenes de lesa humanidad las cuales son detalladas en un informe elaborado por Federación Internacional para los Derechos Humanos (FIDH).
El exmandatario indicó que en el informe “México: asesinatos, desapariciones y torturas en Coahuila de Zaragoza constituyen crímenes de lesa humanidad” se pretende, gratuitamente, vincularme con determinados comportamientos de apariencia delictiva, con los que nada tengo que ver”.
En este reporte, el cual fue apoyado por diversas organizaciones no gubernamentales, se aseguró que “con la ayuda del cártel de Los Zetas, las autoridades mexicanas [en el estado de Coahuila] son culpables de crímenes contra la humanidad desde 2009”, año en el que gobernaba Humberto Moreira.
La FIDH se basa en el análisis de 500 casos de “tortura, privación de libertad y desapariciones forzosas” y acusa al Gobierno de tener “una gran parte de responsabilidad en los crímenes cometidos” y denuncia una “colaboración de las autoridades con el grupo criminal Los Zetas, que controla el estado de Coahuila, donde ataca de forma sistemática a la población civil”.
A decir de Humberto Moreira, el informe se basa en “artículos periodísticos que, o bien reproducen parcialmente la versión difundida en otro medio de comunicación, o emiten, de forma descontextualizada, testimonios indirectos e interesados de narcotraficantes detenidos en EE.UU.”
“No dudo de la buena fe de la FIDH. Sin embargo, creo que la información manejada en el meritado Informe ha sido tomada de forma errónea y omitido datos importantes que habrían ayudado al esclarecimiento de los hechos. Ante tal circunstancia, como ya hice al contestar la información difundida por los autores del Informe, una vez más, doy un paso al frente y reitero mi voluntad de colaboración con ésta Federación, así como con la Fiscalía de la CPI”, indicó el exgobernador.
El exmandatario dijo que las desapariciones forzadas de personas, y las torturas son crímenes de lesa humanidad y por ende de una gravedad extrema, por lo que deben ser esclarecidos para preservar los derechos de las víctimas, sus familiares y toda la sociedad.