Bianca Sierra y Stephany Mayor, dos futbolistas mexicanas de primer nivel que han jugado en la selección mayor de futbol femenil, tuvieron que dejar su hogar y mudarse a Islandia para que su relación de pareja pudiera ser vista sin prejuicios.
Ambas deportistas han relatado a The New York Times cómo en México el exdirector técnico del Tri femenil, Leonardo Cuéllar, les ordenó esconder su relación. También han denunciado el acoso del que fueron objeto cuando decidieron hacer pública su relación sentimental.
Ahora que viven en Akureyri, Islandia, donde juegan para el Thor-KA, equipo que encabeza la liga islandesa y que está cerca de asegurarse el paso a la Liga de Campeones de la UEFA para la siguiente temporada, dicen sentirse bienvenidas.
“Desde el principio sentimos que aquí valoraban nuestro trabajo, nos valoraban como futbolistas, sin prejuicios”, comentó Sierra, una mexicana-estadounidense que cuando todavía era adolescente atrajo la atención de Leonardo Cuéllar, quien la reclutó para que jugara en el equipo de la sub-20 en donde conoció a Mayor.
Stephany, un joven de la Ciudad de México que llamó la atención de la Federación Mexicana de Futbol (FMF) cuando jugaba en ligas amateur masculinas. “Hay muchos tabúes en México para hablar de la sexualidad… Hay cosas que no se hablan, es algo yo creo cultural, no es fácil abrir tu relación. Para mi fue fácil abrirme con ella porque ella desde el principio tenía sus ideas claras de lo que quería, eso me ayudó mucho”, dijo al Times.
Las dos relatan que tras una larga relación a distancia fueron convocadas a la selección mayor en 2015 para un torneo previo a la Copa Mundial, en Chipre. En esa ocasión cuentan que Cuéllar convocó a todas las jugadoras para una reunión sobre las reglas del equipo donde le pidió no ingerir alcohol y ser cuidadosas al usar redes sociales, y fue ahí donde aseguran que les dijo: “A mí no me importa si son novias o no, pero no las quiero ver ahí agarradas de la mano o haciendo desfiguros”. Como ella y Sierra eran la única pareja en el equipo supieron que el mensaje era para ellas.
Cuellar no hizo comentarios al Times, mientras que Mariana Gascón, coordinadora de Operaciones de las Selecciones Femeniles, dijo que la FMF no tenía conocimiento del incidente.
Mayor y Sierra también dijeron al medio cómo tras hacer pública su relación en Instagram recibieron toda clase de mensajes preocupantes: “No quiero que un par de machorras me representen. Dan asco” o “En mi barrio ya las hubiéramos quemado”.
“No estábamos haciendo nada malo y sientes tristeza y enojo que estén diciendo cosas que están fuera de lugar”, dijo Mayor. Sin embargo, eso ha quedado atrás y ahora ellas disfrutan del éxito en Islandia.