El presidente Enrique Peña Nieto informó que en los próximos días sostendrá una reunión con el presidente electo de Estados Unidos, el republicano Donald Trump, para definir el rumbo que deberá tomar el rumbo de la relación de ambos países.
“Mi gobierno buscará en esta nueva etapa de la relación bilateral oportunidades que beneficien a ambas sociedades”, dijo el mandatario mexicano en una conferencia de prensa en la residencia oficial de Los Pinos, donde en agosto pasado recibió al magnate inmobiliario.
La victoria de Donald Trump ha sido recibida con escepticismo en México. Muestra de ello es el desplome del peso, que la jornada de este miércoles cerró con una fuerte pérdida de 7.18 por ciento, al cotizarse en 20.20 por dólar, contra 18.75 del martes, mientras que en la categoría interbancaria se cotizó en 19,91 contra 18,64 del martes.
La Bolsa Mexicana de valores cerró a su vez con una pérdida de 2.23 por ciento. El mercado bursátil mexicano retrocedió 1.088,33 puntos y su principal indicador cerró en 47.390,66, lo que significó sin embargo una recuperación en esta volátil jornada en la que arrancó operaciones con una pérdida de 3.18 por ciento.
La llegada de Trump a la presidencia estadounidense ha desatado gran volatilidad en los mercados mexicanos por su discurso anti-inmigrante y sus amagos de revisar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y expulsar a millones de mexicanos indocumentados.
El republicano también amenaza con intervenir las remesas que envían mexicanos en Estados Unidos, una de las principales fuentes de ingreso del país, si México se niega a pagar la construcción de un polémico muro fronterizo.
Consciente de esta situación, el presidente Peña Nieto apeló a los “lazos inseparables” entre ambas naciones y mencionó que los mexicanos de ambos lados de la frontera “seguiremos trabajando con la seguridad y compromiso que siempre nos han caracterizado” para abrir nuevos caminos de cooperación.
El mandatario se comprometió de nueva cuenta, como lo hizo tras la polémica reunión que tuvo con el entonces candidato republicano, a entregarse “en cuerpo y alma” para velar por los mexicanos donde quiera que se encuentren. “En todo momento mi prioridad ha sido y seguirá siendo cuidar a México y proteger a los mexicanos”, insistió.
Peña Nieto reconoció que con el triunfo de Trump se inicia una nueva era en la relación entre México y Estados Unidos, lo que implicará “un reto pero también una gran oportunidad”, en tanto comprometió su esfuerzo para “abrir nuevos caminos de cooperación y prosperidad”.
“México y Estados Unidos son aliados, socios y vecinos. Cuando a México le va bien a Estados Unidos le va bien, y cuando a Estados Unidos le va bien, a México le va bien”, comentó el mandatario.
Peña Nieto ha sido criticado por haber recibido en México a un Donald Trump en medio del proceso electoral. Un gesto histórico en ambos países. Frente a los cuestionamientos, el presidente mexicano ha dicho que se trató de “una decisión acelerada pero correcta” en la ruta de buscar un espacio al diálogo con el magnate que desde el inicio de su campaña amenazó con bloquear las remesas que los mexicanos en Estados Unidos envían a su país de origen para hacer que México pague su proyecto de una infranqueable muralla fronteriza.
Un 15 por ciento de los mexicanos consideró que el recibimiento de Trump es “el máximo error” de Peña Nieto desde que asumió el mandato en diciembre de 2012, según un sondeo del Grupo GEA-ISA que mostró también una aprobación del presidente de solo 26 por ciento.