La novena encuesta de Evaluación de Gobierno, realizada por el periódico Reforma dio a conocer que por primera vez en lo que va de su administración, el presidente Enrique Peña Nieto sumó apoyo a su gestión. En ciudadanos ésta subió del 34 por ciento en julio de 2015 a 39 por ciento para diciembre.
La percepción para los líderes de opinión, aunque sigue siendo baja, también aumentó de 15 a 21 por ciento para los mismos periodos.
Si comparamos estas cifras con las de los anteriores mandatarios mexicanos, el presidente Peña enfrenta un nivel de desaprobación sin precedentes para la primera mitad de su sexenio. El presidente Zedillo, que gobernara de 1993 a 2000, tenía el 60 por ciento de aprobación a mitad de su sexenio.
A partir de él la cifra ha ido decreciendo. El presidente Vicente Fox tenía a la mitad de su periodo 58 por ciento de aprobación y su sucesor, Felipe Calderón, tenía 52 por ciento. A pesar de estas cifras los tres anteriores mandatarios sí contaban con “calificaciones aprobatorias” en su desempeño, a diferencia de Peña.
El gabinete es calificado de manera reprobatoria, al igual que el mandatario. EL Secretario de la Función Pública, Virgilio Andrade, quien estuvo a cargo de la investigación por la “Casa Blanca”, fue el peor calificado por los líderes. Ellos le dieron un 2.5 en una escala del 0 al 10.
La atención a derechos humanos es un tema delicado para la percepción popular. El 50 por ciento de los líderes de opinión consultados dijo que empeoró el tema, y 54 por ciento de los ciudadanos dijo que sigue igual.
Otro aumento en las percepciones es el de la corrupción. Si bien el desempeño general del presidente muestra una mejoría, el 49 por ciento de los mexicanos cree que ha habido un aumento en la corrupción a nivel federal, comparado con el 36 por ciento que lo creía así en marzo de este año.
A tres años de gobierno, se olvidó el “Mexican Moment”
En febrero del año pasado el presidente Peña apareció en la portada de la revista Time. El título era: “Saving Mexico”. El artículo hablaba de cómo las reformas estructurales harían del país uno a la vanguardia internacional.
A más de un año de aquel momento la prensa internacional ha quedado desencantada con el “momento mexicano.” Las tasas de pobreza no han hecho sino aumentar, el número de asesinatos está en un máximo histórico y varias de las ciudades del país se cuentan entre las más peligrosas del mundo.
“Durante el mandato de Enrique Peña Nieto, un millón de mexicanos ha ingresado anualmente en las mediciones de pobreza, lo que ubica la cifra de población vulnerable en 55.3 millones de ciudadanos, un 46.2 por ciento del total nacional”.
Las promesas del Pacto por México, la educación entre ellas no han sido suficientes para subsanar los problemas estructurales del país. Las reformas en economía y energía tampoco han sido lo que se esperaba.
Ha habido también un aumento en la corrupción del país. El informe del Instituto Mexicano para la Competitividad atribuye a esta el rezago en gobernanza y economía del país. La percepción de la encuesta avala que esto es también un problema para la población.
(Con información de Reforma/Sin Embargo/Animal Político)