En medio de una ovación de pie el presidente Obama, manifestó la confianza que tiene al Congreso de su nación diciendo que este “inevitablemente levantará un embargo que no debería estar más en vigor”.
“El cambio no llegará de un día para otro en Cuba, pero confío en que la apertura y no la coacción apoyará a las reformas y mejorará la vida de los cubanos, como también creo que Cuba encontrará el éxito si busca la cooperación con otras naciones”, añadió Obama haciendo alusión al letargo que han tenido los cubanos a causa de las medidas aisladoras impuestas por la Casa Blanca desde hace más de medio siglo.
Por su parte Raúl Castro, quien realizó la primera visita de un mandatario cubano al a ONU desde la realizada en el 2000 por su hermano Fidel, mantuvo su atención en el discurso de su homólogo mientras esperaba su turno para tomar el estrado.
El líder cubano sentenció que “tras 56 años de heroica y abnegada resistencia de nuestro pueblo, quedaron restablecidas las relaciones diplomáticas ente Cuba y Estados Unidos”. A pesar de esto resaltó que la completa normalización de las relaciones llevará “un largo y complejo proceso”, señalando que ciertos temas como el fin del bloqueo económico y la devolución del territorio ocupado ilegalmente en la base naval de Guantanamo, son primordiales para llegar a la meta.
Puntualizó que sí los castigos económicos siguen azotando a Cuba, se continuará “presentado el proyecto de resolución titulado ‘Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los Estados Unidos de América a Cuba’”.
Anteriormente el sábado había señalado que el embargo es “el principal obstáculo económico” para la isla de Cuba.
(Con información de AFP)