Tom Brady, mariscal de campo de los Patriotas de Nueva Inglaterra, planea demandar a la liga de fútbol americano si llegara a ser suspendido, según indicaron fuentes del sindicato de jugadores a un reportero de ABC News . El jugador fue amonestado con cuatro suspensiones hace algunos meses por su rol en el escándalo de balones desinflados durante el Campeonato de Fútbol Americano, AFC.
Brady ha negado su participación en el Deflategate e incluso apelado las suspensiones emitidas por Roger Goodell. Esta apelación podría haber reducido el número de juegos en que no participe el mariscal a uno o dos, pero pareciera que Brady hará todo para evitar que esto ocurra en absoluto.
Si la demanda llegara a ocurrir, es posible que esto sea en Massachussets, lugar en que Brady es muy apreciado, o también Minnesota, cuya corte fue descrita por NFL Network como parcial y que podría declararse a favor del mariscal de campo.
Según indica el blog deportivo Deadspin, la mera amenaza de ser demandados podría intimidar a la NFL para cancelar las penalizaciones. También sugieren que de no ocurrir esto, la demanda podría ser debatida en la corte por varios años, como ya ha ocurrido en otros casos, y que durante este tiempo a Tom Brady le sería permitido jugar.
Brady, quien guió a los Patriotas a un cuarto título de Superbowl en febrero, fue suspendido por los primeros cuatro partidos de la próxima temporada.
La sanción vino después de que el investigador Ted Wells encontrara que Bradyestaba “al menos en general, consciente” de que el personal del equipo deliberadamente desinfló los balones por debajo de los mínimos permitidos de la liga antes de la Campeonato de la Conferencia Americana contra los Colts de Indianápolis, en enero pasado.
“Dada la historia de la NFL de inconsistencia y decisiones arbitrarias en materia disciplinaria, es justo que un árbitro neutral escuche esta apelación”, dijo el sindicato en un comunicado.
“Si Ted Wells y la NFL creen, de acuerdo a sus comentarios públicos, que la evidencia en su informe es ‘directa’ e ‘inculpatoria’, entonces deben estar lo suficientemente seguros como para presentar su caso ante alguien que es verdaderamente independiente”, concluyó el sindicato de jugadores.
El “Deflategate” entró en erupción el 18 de enero sólo horas después de la final de la Conferencia Americana, paso previo a la clasificación al Superbowl, que ganaron los Patriots ante Indianapolis Colts con pizarra de 45-17.
El escándalo obligó a la NFL a realizar una investigación de cuatro meses, después de la cual impuso una multa récord de un millón de dólares a los Patriots, que también se verán privados de su primera elección en el Draft 2016 y su cuarta opción en el 2017.