Cuando parecía que todo tomada un nuevo rumbo, otro descuido complicó el panorama en el torneo Clausura 2015 a los Tuzos del Pachuca, que aún están lejos de la zona de clasificación.
Aunque la distancia es de sólo tres puntos, el funcionamiento de los hidalguenses sigue dando mucho que desear, a ratos jugando bien, a ratos jugando mal; aunque en sus entrenamientos presumen de trabajar con intensidad, aunque esa intensidad no ha sido vista por los medios de comunicación, que desde que llegó Diego Alonso hicieron un búnker en la Universidad del Futbol, como tratando de ocultar algo.
Ahora, Pachuca tiene en puerta cinco juegos ante rivales muy puntales, tres que están peleando el descenso: Leones Negros, Puebla y Veracruz, y dos que muestran signos de mejoría en el cierre del campeonato: Santos y Pumas.
Estos últimos visitarán este sábado la Bella Airosa, un escenario que se les da a los del Pedreagal, donde inclusive alzaron un título de liga tras vencer a Pachuca 3-2 global, en la final del torneo Clausura 2009.
A este dato negativo se le debe agregar el paso ascendente con el que vienen los felinos, que luego de estar el fondo de la general ahora son novenos con 17 unidades, producto de sus últimas cuatro victorias en fila.
El empate con el que regresaron del estadio Zoque hace que los Tuzos ya no dependan tanto de sí mismos para llegar a la “fiesta grande”, pues necesitan que ocho equipos no sumen.
Aunque habría una ligera esperanza para los blanquiazules, pues el pasado sábado su arsenal ofensivo mostró cosas interesantes: Darío Cvtanich entró para cambiarle la cara a su equipo, hizo buena mancuerna con su compatriota Germán Cano, a quien incluso asistió en el primer gol; ahora se espera que ese binomio cierre fuerte en el torneo.